El Girona conquista el Coliseum con un gol de Yangel

Los catalanes lograron la segunda victoria consecutiva en LaLiga, sumando su primera victoria en el Coliseum en Primera División


El Girona retomó buenas sensaciones tras lograr su segunda victoria consecutiva en LaLiga a costa del Getafe y en el Coliseum, un lugar donde nunca habían sumado de tres en Primera División. El tanto de Yangel al filo del descanso dieron tres puntos muy necesarios a los ‘blanc-i-vermells’, aprovechándose de los madrileños, quienes siguen inmersos en una racha negativa y ocupando el descenso.

Los catalanes se plantaron en Madrid siendo conscientes de que la cita sería más propia de un ejercicio de supervivencia por la cantidad de lesiones con la que se presentó el equipo de Míchel. Los visitantes formaron una convocatoria formada por once jugadores de campo, tan solo con Stuani conformando el banquillo, arropado por una cantera que cada vez es más habitual en las citas del equipo.

Los de Míchel se impusieron a los de Bordalás en el Coliseum Alfonso Pérez
La cita fue dura de masticar, especialmente para los ‘gironins’, quienes sufrieron los duelos y unos primeros minutos de dominio azulón. Hubo ganas de redimirse tras un campeonato que solo mostraba una victoria para los de Bordalás en lo que va de Liga. Frente a ellos, Juanpe -por la lesión de Krejci- y Oriol Romeu fueron las únicas novedades en el esquema gerundense.

Precisamente el de Ulldecona, junto a Yangel Herrera, fueron los elegidos para contrarrestar a los soldados del técnico madrileño, quienes no negocian ninguna acción sobre el césped. Con ambos tomando algo más de control en la medular, llegaron algunos minutos de dominio visitante en un encuentro plagado de momentos intermitentes con el cuero.

Tampoco fue fácil para los madrileños. Sin delanteros puros en el once y con Mayoral en la grada, también se vieron inventos en el once de los getafenses, optando por Nyom en la banda diestra y Uche como referencia en ataque. Aún así, los centros fueron el gran armamento por el que optó Bordalás, junto a las acciones a balón parado.

El primer susto de los ‘blanc-i-vermells’, pero, llegó tras pasar la barrera de los 30 minutos, con Oriol Romeu y Yellu forcejeando cerca del área. Martínez Munuera dirigió el dedo hacia el punto de los once metros, aunque Alberola Rojas tuvo que corregir en el VAR para trasladarle al colegiado principal la imagen en la que el jugador del Getafe no pisaba dentro del área en el momento del contacto entre ambos jugadores.

Inmersos en un desierto de ocasiones, el Girona supo mostrar la efectividad que tanto está añorando durante la temporada. El único remate a puerta, en un centro que botó Bryan Gil buscando el segundo palo, terminó con el testarazo de Yangel, quien voló de forma imperial para abrir la lata antes del descanso (42’).

El tanto no fue motivo alguno de tranquilidad para los ‘gironins’, quienes acumularon un nuevo susto con Gazzaniga yéndose al suelo tras un balón en largo. Cuando todo apuntaba al debut de Pau López bajo los palos, el arquero argentino volvió a aparecer en el segundo tiempo, mostrándose recuperado, a pesar de llevarse la mano a la zona trasera del muslo.

De nuevo, durante el segundo tiempo y de forma descarada, fueron los centros quienes tomaron protagonismo, especialmente por parte de los locales y aprovechando las dudas en la figura de Gazzaniga. Hubo estaciones para ambos cuadros, viéndose a los azulones, por contexto y necesidad, con algo más de ansiedad por avanzar líneas.

El cansancio y la necesidad en la plantilla del técnico vallecano llevó a agitar el árbol con tres cambios de golpe -Stuani, Selvi y Ferran-. El papel, y más con la salida de Yangel, prescindió de solidez en los duelos, pero ganó en control y en el ejercicio de supervivencia que asumieron los catalanes. El Getafe, mientras tanto, no dejó de buscar acciones por la banda que ofrecieran puntos de remate, dejando una de las paradas de la temporada por parte de Gazzaniga.

Apurando los últimos minutos, la cita se convirtió en un vaivén de acciones en dirección a las dos porterías. Los azulones, con más corazón que cabeza, no supieron encontrar el peligro que amenazara al rival y los cuatro minutos de añadido tampoco fueron suficientes para batir la portería contraria.

Así pues, el Girona pudo beneficiarse de su ejercicio de oficio para volver a sacar tres puntos en LaLiga tras el duro golpe en Champions y se marchará al parón a dos puntos de los puestos europeos, mientras que el Getafe se mete en los puestos de descenso, con diez puntos en 13 encuentros.



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El Barça cae con polémica en Anoeta

Un solitario gol de Becker dio la victoria a la Real Sociedad en un partido que estuvo marcado por un controvertido tanto anulado a Lewandowski


Final con polémica a la buena racha de victorias del Barça, que no pudo superar a la Real Sociedad en Anoeta (1-0) y encajó la segunda derrota liguera del curso. Un solitario gol de Becker en el primer tiempo fue suficiente para desnivelar la balanza de un partido que estuvo marcado por el gol anulado a Lewandowski, que hubiera supuesto el 0-1 para los azulgrana pero que no subió al marcador tras la revisión del VAR y la corrección de Cuadra Fernández. Con esta derrota, el Barça sigue líder en solitario con 33 puntos pero ha visto reducida su distancia al frente de la tabla con el Real Madrid, al que saca seis puntos pero los blancos tienen un partido pendiente por jugar.

Pese a viajar a San Sebastián, Lamine Yamal causó baja de última hora por culpa del fuerte golpe en el tobillo derecho que sufrió ante el Estrella Roja y no pudo estar disponible para Flick. El Barça hizo un comunicado para confirmar la ausencia del extremo, que apunta a quedar fuera en los próximos compromisos de España en la Nations League. Su puesto en la delantera lo ocupó Fermín, que jugó en banda derecha y formó tridente junto a Raphinha y Lewandowski. Cubarsí, protegido con una máscara por su aparatoso corte en la cara, sí que fue titular en el eje de la zaga junto a un Iñigo que fue silbado constantemente por su antigua afición, mientras que el retorno de Balde a la titularidad fue la otra novedad en el once azulgrana. El resto, los mismos que golearon en Belgrado, con Olmo arrancando de nuevo desde el banquillo tras la indisposición que tuvo el sábado.

El Barça quería encadenar la décima visita sin perder en territorio ‘txuri urdin’, pero la Real Sociedad tenía otros planes. El conjunto de Imanol salió con mucho ímpetu al encuentro y estuvo a punto de abrir el marcador en la primera aproximación de Sucic. Tuvo que aparecer Casadó de forma milagrosa para evitar el peligro, pero los locales tenían ganas de dar una alegría a una afición que no dejaba de animar en los compases iniciales. Los vascos estaban cómodos, pero el partido pudo cambiar por completo en la jugada del gol anulado a Lewandowski por un fuera de juego milimétrico. Una acción muy polémica en la que ni siquiera la repetición despejó las dudas sobre la posición defensiva de Aguerd, pero que se revisó desde el VAR y el colegiado madrileño Cuadra Fernández decidió anular por sorpresa de casi todos los presentes en Anoeta.

De Jong volvió a tener problemas de tobillo, esta vez el izquierdo, y la permisividad arbitral de Cuadra Fernández dio alas a los locales. Brais, de falta directa, y Take probaron los reflejos de Iñaki Peña antes de la media hora, pero la resistencia culé acabó cediendo. En una jugada sin aparente peligro, Sucic prolongó de cabeza y Becker definió de primeras al palo largo para abrir el marcador y despertar de nuevo a la hinchada ‘txuri urdin’. Era un jaro de agua fría para el Barça, que al filo del descanso se libró del 2-0 tras un fallo incomprensible de Oyarzabal con todo a favor.

Reacción con la entrada de Olmo
El Barça necesitaba agitar el equipo en busca de la remontada y Flick tuvo claro el plan tras el paso por vestuarios. Llegaba la hora de Olmo para suplir a un De Jong que no estuvo nada fino en Anoeta. Nada más arrancar el segundo acto, Becker pudo firmar su doblete pero se equivocó al intentar batir por arriba Iñaki Peña y daba otra vida extra para el Barça, que instantes después estuvo a punto de empatar con un cabezazo de Cubarsí a la salida de un córner. Oyarzabal y Becker volvieron a tener ocasiones claras para ampliar la ventaja de los locales.

Poco a poco, el Barça fue adueñándose del control de la pelota y empezó a encerrar a la Real en su campo. Imanol veía que se complicaba el partido e hizo cuatro cambios a la vez para dar entrada a Aritz, Sergio Gómez, Barrenetxea y Oskarsson. Pese a ello, el Barça siguió apretando en busca del empate y Flick sacó a Ansu por Fermín para tener más pólvora ofensiva. La apuesta no terminó de salir bien y ya a la desesperada entraron Gavi y Pau Víctor para intentar lograr la igualada. La Real resistió bien y puso fin a la mala racha de resultados como local contra el Barça.



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Panichelli le da alas al Mirandés

Con un doblete en cuatro minutos, el argentino fue fundamental para la victoria del conjunto 'jabato' ante un Castellón que recibió los tres goles en nueve minutos


El Mirandés arroyó al Castellón en la primera mitad en cuestión de nueve minutos, dónde logró marcar los tres goles visitantes y logró sumar tres puntos fundamentales para la búsqueda del ascenso a Primera División en una victoria con un Panichelli estelar en los primeros minutos (1-3).

El Castellón salió al encuentro muy ofensivo acechando la portería del Mirandés. En el 15' tras un remate de Cala con el portero vencido, Unai Egiluz apareció bajo palos para salvar el primero del partido. Parecía que los locales eran dueños del encuentro, pero a partir del minuto 20' todo cambió radicalmente.

En el 20' de encuentro, Joaquín Panichelli tras un error de salida de Gonzalo en el saque de falta provocado por el propio delantero argentino, éste definió a la perfección y puso el primero del partido. A partir del gol, el Castellón se vino abajo y el Mirandés fue una apisonadora y estuvo cómodo con una presión alta que no suele ejercer el conjunto 'jabato'.

En el 24', Panichelli volvió a marcar tras una gran bajada de balón en medio del campo con la cabeza hacia Alberto Reina quien le devolvió el balón con la misma cabeza al primer toque hacia el argentino que en un uno contra uno, recortó a Gonzalo y remató a portería vacía. Y en el 29', Urko Izeta tras la recuperación de Reina y un centro raso de Hugo Rincón, puso el tercero en nueve minutos sometiendo al Castellón.

El partido bajó las revoluciones, pero en el 40' Gonzalo realizó una gran parada abajo para evitar el tercero de Panichelli. En el 47', tras una larga revisión del VAR por una falta de Josep Calavera sobre Urko Izeta, dejó al Castellón con uno menos tras una dura entrada sobre el jugador jabato. La primera parte finalizó con el SkyFi Castalia coreando al árbitro "qué malo eres" por la expulsión.

El Mirandés comenzó la segunda  mitad atacando la portería rival, Homenchenko en el 50', estuvo cerca de poner el cuarto en un remate desde fuera del área y en el 53', Jetro Willems, evitó otro gol del conjunto visitante despejando el balón bajo palos.

A partir de la primera hora de encuentro, el partido se rompió con ocasiones para ambos equipos y el Castellón comenzó a tener protagonismo sobre un Mirandés que aguantaba atrás buscando el contraataque. En el 75', Raúl Fernández hizo un paradón en un uno contra uno con Sergio Moyita. En los últimos minutos de encuentro Joel Roca tuvo dos jugadas para aumentar el marcador pero no fue capaz de finalizarlas con éxito.

Con el partido casi finalizado, Raúl Sánchez marcó de volea en el 90' el gol del honor para el Castellón tras un rechace dentro del área. En el 92', Raúl Fernández evitó el segundo que hubiera puesto a los locales en el partido. El portero del Mirandés fue fundamental para evitar un posible empate ante las numerosas ocasiones claras del conjunto local.

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El Racing, un súper líder que también sabe sufrir

El conjunto cántabro sigue de dulce y sumó otros tres puntos más en su espectacular inicio de temporada al imponerse al Burgos


El Racing de Santander sigue de dulce y sumó otros tres puntos más en su espectacular inicio de temporada al imponerse al Burgos (2-0), en un encuentro en el que tras la expulsión de Manu Hernando, antes del descanso, tuvo que resistir toda la segunda parte con un futbolista menos para mantener su ventaja intacta.

El conjunto cántabro quería ofrecer a su afición una nueva victoria y saltó al terreno de juego dominador, demostrando por qué lidera con autoridad la categoría de plata del fútbol español, llevando el peso del encuentro, manejando el esférico y prácticamente sin dejar salir de su campo a un Burgos bastante desdibujado en los primeros compases del encuentro.

Así, en la primera ocasión del partido, tras una buena transición por banda izquierda, el balón llegó en la frontal del área a Íñigo Vicente, que volvió a sacar a relucir su calidad en la zona de peligro para ver la incorporación de Sangalli por la banda derecha y cederle un balón que el futbolista vasco no desperdició para adelantar a los verdiblancos.

Poco después, pasado el minuto 20, Íñigo Vicente votó una falta desde el pico del área, y Montero, libre de marca, cabeceó el balón al fondo de las mallas para llevar el delirio a la gradas de El Sardinero que, con el 2-0, empezaba a saborear ya un nuevo triunfo de su equipo.

Sin embargo, el Racing de Santander quiso ponerle un poco de emoción al partido y, al filo del descanso, Manu Hernando, en otro error garrafal como el que le condenó en Zaragoza, y le llevó a la suplencia en los siguientes encuentros, se vio obligado a agarrar a Fer Niño al borde del área, siendo el último defensor, por lo que el colegiado, Ais Reig, le mostró la tarjeta roja directa, dejando a su equipo con diez hombres toda la segunda parte.

En el segundo acto, aunque sin renunciar del todo al ataque, al Racing de Santander le tocaba sufrir para mantener su ventaja y, según avanzaban los minutos y el Burgos acechaba cada vez más el área santanderina, empezó a aparecer la figura de Jokin Ezkieta bajo los palos, otro de los pilares del buen inicio de campaña de los cántabros.

Tras un tramo de asedio burgalés, el técnico local, José Alberto López, introdujo un triple cambio para meter más músculo en el campo y pasó a defensa cinco, consiguiendo neutralizar el empuje del Burgos, que no supo aprovechar su ventaja numérica y prácticamente no volvió a inquietar a un Racing de Santander que ofreció una lección de resistencia para certificar una nueva victoria.



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El Granada se lleva una victoria con doble valor de El Molinón

El conjunto dirigido por Lucas Alcaraz se llevó un encuentro no exento de polémica


El Granada, en un partido tras un primer tiempo sin ocasiones y un segundo muy emocionante, rompió la racha de cinco victorias seguidas del Sporting como local y se llevó los tres puntos gracias a los goles de Weissman y Siren Diao.

Rubén Albes tuvo que hacer frente a la baja de última hora de Guille Rosas por molestias y por eso Kevin entró en el lateral derecho del Sporting, mientras que Fran Escribá y su Granada suplieron las múltiples bajas (hasta ocho), entre las que se encontraban Loic Williams, Tsitaishvili o el goleador Uzuni, con un dibujo de tres centrales y carrileros.

Después de que en el minuto 5 Lucas Boyé marcase un gol en claro fuera de juego tras correr al espacio, el partido se tranquilizó y tanto Sporting como Granada se respetaron mucho, amenazándose mínimamente, pero sin sumar ningún acercamiento con peligro. El primer tiempo avanzaba y fue el Granada el que en la recta final se estiró un poco más gracias a sus carrileros, con Brau llegando por la izquierda, poniendo un centro atrás y Reinier sacando un disparo que se fue rozando el segundo palo.

Ya en el segundo tiempo, y después de más minutos de tregua, el partido enloqueció primero con otra jugada del Granada por la izquierda en la que Brau llegó por la banda, centró y tras un despeje de Rober Pier fue Weissman el que enganchó una volea ajustada que batió a Yáñez.

Solo seis minutos después, en la primera llegada del Sporting tras mucho tiempo, Dubasin centró desde la derecha y Juan Otero se adelantó a la defensa nazarí para cabecear y marcar el 1-1. El Granada estuvo muy cerca de marcar el 1-2 casi en la siguiente jugada, pero el disparo de Lucas Boye, que había regateado a Pablo García y Rober Pier, se fue rozando un palo. Ambos entrenadores movieron su banquillo, con Albés metiendo a Nacho Martín, Campuzano y Caicedo, y con Fran Escribá apostando por Gonzalo Villar.

Fue pasado el minuto 80, justo después de que Fran Escribá sacase a Pablo Sáenz y Siren Diao, cuando el Granada marcó el 1-2 en otra acción surgida del acierto de Lucas Boyé, que cedió de espaldas para el propio Siren Diao, que corrió al espacio y con un disparo fuerte batió a un Yáñez que solo fue capaz de tocar el balón.

En el tiempo añadido, el Sporting consiguió empatar por medio de Olaetxea, pero el VAR anuló el gol por fuera de juego del centrocampista rojiblanco. No hubo tiempo para más y el Sporting volvió a perder en casa tres meses después, mientras que el Granada iguala al conjunto asturiano en puestos de ascenso directo.

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El Cádiz supera al Córdoba en la clasificación y suma para alejarse del descenso

Los gaditanos se alejaron de las zona baja de la tabla y vencieron gracias a dos goles en la primera mitad


En la primera parte, el Cádiz salió con fuerza, se acercó con intensidad al área cordobesa y no tardó en llegar la primera oportunidad, en un intento de Javier Ontiveros que acabó con el balón estrellado en un poste en el 8'.

A medida que pasaron los minutos, los gaditanos perdieron fuelle y eso lo aprovechó el Córdoba para estirarse hacia arriba. En una de estas avanzadillas, Antonio Casas pegó un zambombazo desde el exterior del área y la pelota fue repelida por el larguero en el 20' de partido.

El Cádiz sufrió un contratiempo al lesionarse el defensa derecho Joseba Zaldúa, con lo que el técnico del equipo, Paco López, incorporó al campo a un central para apañar la cobertura de la posición de lateral.

Cuando peor lo estaba pasando el conjunto gaditano, porque el control del partido había pasado a manos del Córdoba, se adelantaron los locales. El delantero Roger Martí fue objeto de un penalti que chutó Javier Ontiveros, rechazó el portero Carlos Marín y el propio tirador de la pena máxima anotó en boca de gol en el 37' de encuentro.

El Cádiz aumentó su cuenta en el tiempo añadido al meter la pierna Roger para cazar un balón en el área rival, lo que motivó que con el 2-0, tras la reanudación, se dedicara a cuidar las zonas de avance del Córdoba para conservar el marcador favorable.

Con el paso de los minutos, el cansancio hizo mella en el conjunto local, lo que vieron los cordobeses, que pretendieron acercarse al área adversaria para intentar recortar distancias en el marcador, pero no aprovecharon algunas ocasiones claras ante el portero local, propiciadas, aparte de por el empuje visitante, por las facilidades que empezó a dar el Cádiz.

Paco López movió el banquillo para dar refresco a sus líneas y el técnico del equipo cordobés, Iván Ania, para cimentar la presencia en ataque y tras ello se dio que el meta local, David Gil, evitara el primer gol de los visitantes al detener un disparo de Ánder Yoldi en el 86'.

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