Los hermanos Williams y Munuera amargan al Español

El Athletic se impuso justamente al Español en el debut de Luis García en el banquillo


El 'efecto Luis García' no surtió el efecto deseado este sábado en el RCDE Stadium. El debut del asturiano al frente del Espanyol no ayudó a que su equipo sacara la cabeza del barro, o lo que es lo mismo, no logró una victoria de oro que hubiera supuesto salir de la zona de descenso e insuflarse moral. Con el nuevo mazazo, la quinta derrota seguida, el Espanyol se hunde en la zona de descenso y siguen más activadas que nunca las alarmas pues la imagen del equipo no mejoró mucho respecto a lo visto en el último mes de la mano del cesado Diego Martínez.

Mientras que el Athletic, que llegaba muy tocado tras el KO copero, se sacó la espina tras el revolcón y se sube al tren europeo, muy cerca de la sexta plaza que ocupa el Villarreal, gracias a dos golazos de los hermanos Williams. Iñaki hizo el primero en el 22' y Nico firmó la sentencia en el 75', mientras que Darder firmó el único perico ya en el 90' para poner emoción en una caótica recta final. El Espanyol peleó tarde y mal y ya no pudo lograr ni un empate.

El Espanyol cayó de forma merecida ante un mejor Athletic pero es de recibo destacar que la actuación arbitral, tanto del colegiado Munuera Montero como del VAR, no ayudó mucho a los catalanes. Es más se vieron perjudicados gravemente al filo del descanso y con 0-1 en el marcador con la anulación de un golazo de Braithwaite por una supuesta mano previa de Joselu que estaba siendo agarrado. Una decisión muy polémica, una interpretación que rozaba el error de bulto porque el ariete estaba siendo agarrado y no podía ser una mano voluntaria, y que indignó terriblemente tanto a los jugadores como a la grada del RCDE Stadium.

El Athletic, muy superior, se llevó el triunfo del coliseo perico ante un Espanyol que encadena su quinta derrota y se complica y mucho la vida, incrustado en la zona caliente. Luis García no ha tenido tiempo para cambiar muchas cosas en apenas tres entrenamientos pero tiene un trabajo descomunal en estas 10 finales que restan para frenar la hemorragia, compita mucho más y se acabe salvando.

Las principales novedades en el primer once de Luis García como capo del banquillo fue la suplencia de 'Vini' Souza y la titularidad del doble pivote formado por Gragera y Edu Expósito, con Darder por delante cuando el Espanyol atacaba, viéndose al de Artà algo más adelantado, como un media punta, en relación al dibujo de Diego Martínez.

Como ya se esperaba, Óscar Gil volvió a actuar como lateral zurdo para volver a suplir la importante baja de Brian Oliván, mientras que Rubén Sánchez fue el lateral diestro. Precisamente por la banda de Gil fue por la 'autopista' por donde el Athletic hizo mucho daño, con un Iñaki Williams en modo apisonadora, mientras que su hermano Nico, triste protagonista de la semi copera por las críticas e insultos que recibió y que le obligaron a cerrar sus redes sociales. arrancó en el banquillo.

Después de un primer cuarto de dominio alterno, viéndose un Espanyol que la intentaba sacar controlada desde atrás, el Athletic se hizo con el mando y empezó a achuchar a Pacheco con ataques envenenados y muy verticales. Y el Espanyol, a sufrir.

El premio al mejor acoso llegó en forma de gol para los de Valverde, que no fallaron en la primera ocasión clara en el área perica. En el minuto 22, Dani García se inventó un gran pase al espacio e Iñaki Williams, una bala, le ganó la espalda a un desafortunado óscar Gil y por velocidad se plantó ante Pacheco para batirlo con un derechazo brutal, una definición de lujo para poner el 0-1.

El gol hizo mucho daño a un Espanyol que empezó a perder balones y siguió sin poder conectar con Joselu, una isla arriba. Es más, el nerviosismo empezó a hacer mella en la afición y se oyeron los primero silbidos a raíz de que Vesga primero (28')y sobre todo, Sancet (37') volvieron a dar trabajo a Pacheco. Más pitos en la grada.

En la recta final pasó de todo. En el 41' Joselu tuvo la primera medio clara para el Espanyol, la segunda vez que los pericos chutaban entre los tres palos. El latigazo lejano del pichichi salió acariciando el palo derecho de Unai Simón.

La polémica saltó y de qué manera en el 45'. Joselu se peleó en el área y remató como pudo medio cayéndose y el balón quedó muerto, cazándolo de primeras Braithwaite para engatillar un brutal zapatazo para batir a Unai Simón. Se cayó el estadio y enloquecía el banquillo, abrazados todos a Luis García.

Pero segundo después el estadio se congeló cuando el colegiado Munuera Montero, a instancias del VAR, fue a revisar la jugada y anuló incomprensiblemente el golazo del danés al interpretar que en la jugada previa Joselu, que estaba siendo agarrado, se había ayudado supuestamente de su mano para rematar. Gol anulado, indignación total en la grada y en el verde por la polémica decisión. 

La hinchada y el vestuario estallaron contra el colegiado pues llovía sobre mojado. Apenas un minuto antes del golazo anulado, el propio Munuera Montero había perdonado la segunda amarilla y consecuente expulsión a Dani García, que hizo una falta táctica de manual. Nadie entendía nada y la parroquia se fue al descanso muy enfadada.

El Athletic salió mordiendo en la segunda parte, buscando la sentencia rápida, pero el Espanyol daba la replica, rompiéndose el partido con los dos equipos abocados al ataque en la reanudación. Un espejismo tal y como se puso esta segunda mitad.

Luis García, viendo que su Espanyol no reaccionaba, movió rápido el banquillo y dio entrada a Aleix Vidal ya en el intermedio y luego a Nico Melamed buscando oxigenar el ataque. Pero el Athletic, herido tras la Copa y con mucha más pólvora que los locales, pronto dio señales que quería atar el triunfo pronto.

En el 58' Guruzeta tuvo el segundo gol vasco en sus botas pero salvó Pacheco. Y volvió a ser providencial el meta perico en el 68' con una mano prodigiosa para desbaratar el 0-2  tras un gran chut de Iñaki Williams, que se aprovechó de una pérdida de balón de Gragera en la zona peligrosa. El Espanyol juega con fuego y no daba una a derechas, muy blando en la medular, poco agresivo en la presión y sin veneno arriba.

El Athletic siguió a la suya, dando guerra y la salida de Nico Williams provocó que la sentencia cayera. En el 74' el pequeño de los Williams se inventó un jugadón tras dejar sentados a varios perico, pero su pase de la muerte no encontró rematador.

Y un minuto después, Nico ya no falló. Con un recorte se hizo a Aleix Vidal y se sacó un disparo colocado para poner el 0-2, el lacito a la victoria y la sentencia para un Espanyol desesperado y sin capacidad de reacción ante un once rojiblanco muy superior.

El colegiado Munuera Montera seguía desquiciando a la grada y a los jugadores de Luis García pues perdonó la segunda amarilla a De Marcos hasta en un par de claras ocasiones. Mal arbitraje.

Todavía había tela por cortar y protagonismo innecesario del Munuera. En el 90' Darder metió pimienta in extremis con un gol de pillo, aprovechando que Unai Simón despejó blando y dejó el balón muerto. Puso el 1-2 el Espanyol y la grada se reactivó, indignada de nuevo cuando sólo se dieron 3 minutos de descuento con todo lo que había pasado.

Pero Aleix Vidal se encargó de dilapidar las escasas opciones que podía haber tenido el Espanyol para arañar un punto. El lateral perico vio dos amarillas seguidas en el 92'. La primera por una entrada de libro sobre Williams pero al protestar de forma airada, vio la segunda rápida. Roja para Aleix y a la calle. El Espanyol se exprimió hasta el final pero no había tiempo y la derrota justa se acabó  consumando. El cuadro de Luis García sigue hundido en el lodo, mientras que el Athletic se sube al tren europeo.



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El Real Madrid se pierde pensando en la Champions

¡Brutal golazo de Chukwueze y nueva polémica arbitral!


Hace tiempo que LaLiga para el Real Madrid, aunque lo niegue por pura profesionalidad, es más un laboratorio de ensayos que un escenario de grandes noches. Sin embargo, la derrota clara ante el Villarreal (2-3) de un Samu Chukwueze espectacular, autor de dos goles, deja tocados a los blancos de cara al duelo de este miércoles ante el Chelsea. Por su parte, a los de Setién les da unas alas enormes para seguir creyendo que se pueden meter en el cuarto puesto de nuevo este año

Y es que, pensando en la Champions, que es donde tenía el Real Madrid la cabeza al menos metafóricamente, Carlo Ancelotti introdujo hasta seis cambios respecto al pasado Clásico. Jugadores como Militao, Modric, Carvajal, Camavinga, Kroos o Valverde, que se presuponen importantes para el miércoles, vieron la mayor parte del choque desde el banquillo y otros como Asensio, Ceballos o Lucas tuvieron su oportunidad.

Fortuna y perdón
Aún así, que el equipo blanco jugara sin muchos de sus titulares no lo notó. De hecho, los menos habituales fueron los que más destacaron llevando el ataque sobre todo por la banda izquierda con Ceballos y Nacho al mando de las operaciones. Así, después de un aviso de Vinicius, el 1-0 llegó con una mezcla de fortuna y tesón. Ese que tiene Marco Asensio de seguir siendo importante en el Real Madrid y que viene demostrando cada vez que juega, ya que casi siempre destaca. Suya fue la carrera en el nacimiento de la jugada que acabó muriendo en la portería amarilla tras un centro que tocó en las piernas de Pau Torres para fortuna de los blancos.

Eso espoleó a los de Setién que, hasta entonces, estaban un poco blancos en defensa y poco a poco fueron cogiendo confianza hasta que en el 38' Samu Chukwueze 'bailó' sobre el balcón del área para deshacerse de Nacho y definir a la perfección ante Courtois. Un gol de habilidad y talento que silenció al Bernabéu. Y eso solo era el principio. Poco después, el mismo Chukwueze sufriría una durísima entrada con los tacos por delante de Tchouaméni que el árbitro no consideró ni para amarilla. Y con el lógico enfado de los visitantes, se llegó al descanso.

Vinicius y Chukwueze, los mejores
Ya en la segunda mitad, el partido volvió pronto a caer del lado blanco. Otra vez Vinicius, como en la primera mitad, primero avisó y después golpeó definiendo a la perfección en el mano a mano ante Reina después de colarse por el ojo de la aguja de la defensa amarilla. El brasileño era un puñal por la banda izquierda de un Foyth que le intentó parar de todas las formas posibles dentro y fura del reglamento.

Aún así, el partido no estaba ni mucho menos resuelto y los cambios de Setién, que introdujo a Morales y Alberto Moreno, hicieron efecto. De 'El Comandante' fue el 2-2 después de que anularan un gol a Mandi por claro fuera de juego y Yeremy Pino desaprovechara un disparo lejano. Es decir, lo estaba buscando el Villarreal y Morales, después de una revisión de VAR, terminó haciendo el empate.

Pero no conformes con el punto, el Villarreal siguió peleando y de nuevo con una genialidad de Samu Chukwueze hizo el 2-3. El nigeriano, extremo zurdísimo donde los haya, se sacó un latigazo a la escuadra al que Courtois no pudo responder.

Ya con el marcador a favor, al Villarreal le esperaban unos minutos en los que sabía que debía sufrir para conservarlo y es lo que hizo. Alberola Rojas se desdijo de un penalti a favor de los blancos que primeramente había señalado y los de Ancelotti, pese a que lo intentaron, no pudieron empatar el partido y cosecharon una derrota dolorosa en lo anímico antes de la Champions.



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Pezzolano se estrena con un punto de locura

Valladolid y Mallorca empataron en el debut del uruguayo como técnico blanquivioleta


Paulo Pezzolano se estrenó en el banquillo del Valladolid sumando un punto de locura (3-3) ante el Mallorca, que tras verse hasta dos veces por debajo en el marcador empató en el tiempo de descuento gracias a un gol de Muriqi desde los once metros.

Pese a las múltiples bajas con las que llegaba a tierras pucelanas, el encargado de generar más peligro durante un primer tramo de partido marcado por la mala puntería de Amath fue el conjunto isleño, castigado por Kike Pérez pasada la media hora de juego. El toledano superó a Rajkovic con un voleón antológico y se estrenó así como goleador en Primera con el Valladolid.

Del posible 2-0 al 1-1 de Muriqi
Tras el paso por vestuarios, Óscar Plano pudo doblar la ventaja local con un tiro a bocajarro que repelió como pudo Rajkovic. Y del posible 2-0 pasamos al 1-1. Muriqi, quién sino, igualó la contienda al cabecear un centro desde la derecha de Maffeo. Instantes después, Morlanes celebró su primera titularidad con el Mallorca con su primer tanto como bermellón.

El jugador cedido por el Villarreal recogió una pelota rechazada por la barrera tras un tiro libre botado por Kang In Lee y batió a Masip, ya recuperado de su lesión, con un derechazo al palo corto.

Revulsivos Amallah y Monchu
Pezzolano agitó el árbol con un triple cambio y la jugada no pudo salirle mejor. Iván Sánchez y Amallah, dos de los recién ingresados, fueron clave en el 2-2, obra del marroquí. Monchu, otro revulsivo del técnico uruguayo, le dio un nuevo giro de tuerca al partido con un gran cabezazo en el 87’ que llevó al delirio a la hinchada local... Pero un penalti por mano de Larin que Muñiz Ruiz señaló a instancias del VAR dejó en solo un punto la sutura recibida por el Valladolid tras la hemorragia que provocaron el set en blanco encajado en el Santiago Bernabéu y la posterior destitución de Pacheta.



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El Almería se lleva una final por la salvación ante Valencia

Los goles de Melero y Babic permiten al equipo de Rubi salir del descenso


El Almería se llevó un partido de seis puntos contra el Valencia en la guerra que ambos comparten por la permanencia gracias a un gran arranque de segunda parte que le permite coger aire. Dos zarpazos de Melero y de Babic en la reanudación desnudaron al conjunto de Baraja, que a pesar de recortar distancias con un gol de Castillejo cae a la zona de descenso merced a otra pobre actuación individual y colectiva de sus futbolistas, incapaces de competir en una situación de máxima presión para una institución que no está acostumbrada a luchar en lodazal de la zona baja.

Empatados a 27 puntos en la zona roja de la clasificación, Almería y Valencia afrontaron un duelo trascendental por la salvación atenazados por la tensión y por el miedo a perder. La obligación común de ambos equipos era no arriesgar más de la cuenta en ataque y sobre todo evitar errores en defensa, lo que derivó en un encuentro cerrado y con escasos acercamientos a las áreas.

El Valencia trató de llevar la iniciativa pero sus buenas intenciones se atascaban siempre en la zona de tres cuartos mientras que el Almería optó por resguardarse para salir al contragolpe con la calidad de Robertone para activar la velocidad de Luis Suárez y compañía.

El encuentro se disputaba metro a metro y duelo a duelo en una batalla sin cuartel pero con escaso fútbol que vivió un punto de inflexión pasada la media hora. El Valencia conectó una gran contra en una combinación fugaz entre Hugo Duro y Castillejo. El extremo citó a Kluivert con Jaime en el mano a mano y el delantero picó el cuero antes de ser golpeado por el portero y Babic evitó el 0-1 cerca de la línea de gol.

Los jugadores del Valencia se abalanzaron sobre Sánchez Martínez reclamando penalti en una acción fronteriza pero tras una conversación con el VAR de unos dos minutos mandó seguir sin revisar la jugada. En las repeticiones de la realización se aprecia contacto pero los colegiados consideraron que no era suficiente para señalar pena máxima.

El infortunio para el Valencia no quedó ahí, pues poco antes del descanso Kluivert sufrió una lesión muscular y tuvo que ser sustituido por Fran Pérez y al poco de empezar la reanudación, mientras Nico estaba siendo atendido por un golpe, Melero adelantó al Almería en el marcador con una llegada marca de la casa aprovechando la inferioridad numérica momentánea del Valencia (49’).

El 1-0 dejó grogui al equipo de Baraja y sentó de maravilla a un Almería que acumuló varias ocasiones en plena crecida. Mamardashvili sostuvo al Valencia en el alambre con un paradón a Puigmal (52’). No aflojaba el conjunto de Rubi y tampoco reaccionaban los visitantes y en medio de la buena inercia llegó el 2-0 de Babic a la salida de un córner botado por Robertone. El central serbio conectó un testarazo entrando totalmente solo en el segundo palo y destapó las vergüenzas defensivas de un Valencia inoperante en su área (58').

Si el 1-0 tuvo un efecto catastrófico para los valencianistas, el 2-0 le dio un impulso del todo inesperado, pues solo tres minutos después Castillejo recortó distancias en un afortunada carambola en el área almeriense. El primer gol a domicilio del Valencia en todo 2023 cambió por completo el escenario y el cuadro che, ya sin nada que perder y avistando la posibilidad de rascar puntos, se lanzó con todo a por la portería de Jaime con Cavani como gran estilete.

El Almería se entregó por completo a un ejercicio de resistencia en su área y logró sostener las acometidas de su rival gracias a la gran actuación de Ely y Babic, inconmensurables en su área. Hugo Duro, Cavani y Musah desde la derecha generaron opciones de peligro pero la falta de puntería.



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