El Atleti aleja al Real Madrid de LaLiga

Real Madrid y Atlético suman un punto que no les sirve ni a los blancos ni a los rojiblancos para sus objetivos ligueros


Real Madrid y Atlético se fueron del derbi como vinieron, es decir, sin sumar un triunfo que era fundamental para sus aspiraciones ligueras. El derbi, que fue bastante flojo, acabó en empate y eso significa que el Madrid puede quedarse mañana a 10 puntos del Barcelona, que juega en Almería. Por su parte, el Atlético puede ver como la Real Sociedad se aleja a cuatro puntos en la tercera plaza.

La primera sorpresa del derbi cayó del lado blanco donde Ancelotti decidió que era el mejor día para estrenar un nuevo centro del campo. Ni Tchoauméni, ni Camavinga, ni Modric ni todo lo especulado durante la semana. No, el italiano apostó por Kroos de pivote con Ceballos y Valverde a los lados. Una medular inédita para enfrentarse a un Atlético en el que Simeone sí que puso el once con el probó durante la semana. Puestas las cartas sobre la mesa. faltaba que comenzara a rodar el balón y en cuanto lo hizo, se vio claro lo que iba a hacer cada equipo. Por parte blanca, todo a Vinicius y sin desmarques ni circulación rápida del balón para romper la defensa y la presión del Atlético de Madrid. Un equipo, el rojiblanco, bien armado defensivamente y que en ataque dependía prácticamente todo de la inspiración de Griezmann.

Todo eso pudo cambiar en el minuto cinco con una mano involuntaria de Valverde dentro del área que el árbitro no señaló y el VAR no le corrigió a pesar de las peticiones rojiblancas. Los minutos iban pasando con la sensación de que cuando el Real Madrid aceleraba, generaba ocasiones, pero eso pasó en contadas ocasiones y que el Atlético, en el que se lesionó Reinildo en el minuto 21, parecía más o menos cómodo con lo que se estaba viviendo en el campo. Aguantaba bien atrás sin perder nunca de vista la portería de Courtois a la que se acercó con peligro más de una vez. En resumen, mucho ruido y pocas nueces para llegar sin goles al descanso.

El segundo acto comenzó con Simeone quitando a Barrios para dar entrada a Correa en lo que pareció una declaración de intenciones de tener más presencia en ataque. El Real Madrid, por su parte también hizo su declaración de intenciones que fue adelantar sus líneas, presionar cerca del área rojiblanca y así, intentar tener más cerca el ansiado gol. Eso sí, con ese gesto, el equipo blanco estaba dando mucha sensación de peligro. O al menos, de ponerle más ganas que en la primera parte, pero con eso no bastaba para batir a Oblak. Algo que sí estuvo a punto de hacer Griezmann con Courtois en el minuto 61 en la mejor ocasión que había tenido el Atlético hasta entonces.

Ancelotti reaccionó haciendo un triple cambio para dar entrada de golpe a Tchouaméni, Camavinga y Modric. Aunque lo que cambió el partido fue una roja directa a Correa en el minuto 64 por un codazo del argentino a Rüdiger que hizo teatro del bueno, como dijo aquel. Lo que parecía un simple forcejeo, acabó con el Atlético con uno menos y con el derbi calentándose por ese episodio. Al Madrid parecía que se le abría el cielo, pero se encontró con un Atlético que se sobrepuso a todo y se adelantó en el marcador con gol de Giménez en el minuto 78 tras cabecear una falta. Ese 0-1 significaba casi el adiós a la Liga de un Madrid al que no le quedaba otra que ir con todo a por todas.

Ancelotti acumuló hombres de ataque en el campo para buscar el camino del gol que le permitiera pensar en la remontada. Y lo encontró en la cabeza de Álvaro Rodríguez que marcó el 1-1 en el minuto 85 a la salida de un saque esquina.  Delirio en el Bernabéu y ánimos renovados de los blancos con ese gol ante un Atlético que no perdió la compostura y en el que apareció Oblak para frustrar los ataques locales. Al final, el Real Madrid se quedó con las ganas y tuvo que conformarse con un punto que, en principio, le sirve de muy poco en esta Liga.



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