Re:Liga Futbol Española 2022 - 2023 .



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Autor Tema: Liga Futbol Española 2022 - 2023  (Leído 24615 veces)

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Re:Liga Futbol Española 2022 - 2023
« en: 14 de Febrero de 2023, 03:00:59 03:00 »


La Real activa el modo rodillo y luego se relaja

Destroza al Espanyol en una primorosa primera hora de juego, pero termina sufriendo


La Real enamoró en las horas previas al Día de San Valentín, pero también se relajó. Los que pensaban que este equipo podía entrar en barrena tras pinchar ante el Valladolid estaban muy equivocados. Nada más lejos de la realidad. Los donostiarras activaron el modo rodillo para aplastar en los primeros 70 minutos de partido a un Espanyol que reaccionó al final, pero al que no le alcanzó para rascar nada. Decidieron Kubo, Sorloth y Cabrera en propia meta, pero fue un espectáculo el partido de supuestos secundarios como Zubimendi, Illarramendi u Oyarzabal y un triunfo coral de una factura extraordinaria hasta ese final que lo afeó. No sólo son tres puntos más, la consolidación de la tercera plaza, dejar a 10 al séptimo (Athletic) y 11 al octavo (Villarreal), es comprobar que esta Real nunca se fue, que activa a jugadores que han sufrido a gravísimas lesiones, que recupera a Merino y Sola y que no pierde a Le Normand y Zubeldia, que se mantienen con cuatro amarillas.

Los dos goles del Espanyol quedan en el capítulo de anécdotas y agitaron un tramo final que debió ser plácido por la tremenda superioridad de los realistas. El aspecto más negativo, las lesiones de Barrenetxea y Zubimendi.

Imanol, en este caso, no había jugado al despiste en la rueda de prensa previa al encuentro y no incluyó ni a Merino ni a Sola ni a Guevara, las tres novedades en la convocatoria, en el 'once' inicial. Había dicho que les veía lejos de su plenitud. Brais y Oyarzabal por Marín y Navarro fueron los únicos cambios en una alineación dispuesta en un 4-3-3. Otro factor novedoso para impactar a Diego Martínez. Y a Imanol le salió la fórmula porque fue una delicia ver jugar a los txuri urdin durante unos primeros 45 minutos primorosos de fútbol total en los que sólo les faltó sentenciar con más goles.

Más allá del gol de Kubo, del 70% de posesión y de los ocho disparos a puerta, fue esa sensación de jugar otra Liga, de pertenecer a otro planeta futbolístico que el Espanyol. Se conoce bien en la Real porque ha sido muy habitual en los duelos contra el Barça y el Madrid. Y eso que todo comenzó con cinco minutos de caos, de puro despropósito en los que el equipo guipuzcoano no encajó un gol porque Remiro estuvo sembrado para sacar mecánicamente los dos brazos para repeler un balón cabeceado a quemarropa por Calero.

A partir de ahí, Zubimendi se colocó entre los centrales para repartir con magisterio, Illarra flotaba por todo el campo y en todos era el jefe, recibiendo el cuero y entregándosela siempre a uno vestido igual que él, Oyarzabal se desplegaba y esprintaba como antes de la lesión y Kubo encabezaba la revolución con esa marcha de más que confiere a cada acción. Y luego está Sorloth, que causa pavor a las defensas.

'Txitxarro' de Kubo
Fue Cabrera el que salvó con la testa el primer disparo con marchamo de gol de Zubimendi y luego, Álvaro Fernández, el que en dos tiempos cazó el misil de Oyarzabal. La Real ya había activado el modo invasor. Y así llegó la jugada del gol, como consecuencia natural de los acontecimientos,  un prodigio técnico manchado en parte por un despeje corto del Espanyol. Zubeldia, atinadísimo en sus envíos en largo, trazó un pase transoceánico a Oyarzabal, que paró, contemporizó y lanzó al espacio a un Illarra que estaba hallando petróleo a la espalda de Gil por la izquierda. No llegó Sorloth, pero el balón lo cazó Kubo, que fusiló como el que come sushi en su salón. Control aéreo, acomodo del cuerpo para ponerle el picante del wasabi al disparo y 'a la jaula'. Le dobló las manos al meta perico.

Los minutos siguientes fueron de abuso donostiarra. La Real mandaba asociándose, jugando en largo, a la contra, por dentro, por el exterior, robando constantemente con su presión adelantada... pero no marcaba el segundo. Sorloth mandó a L´Hospitalet el cuero tras una jugada de 'Globetrotters' entre Kubo y Rico. Cabrera volvió a salvar el gol en este caso tras un cabezazo de Brais y Sorloth, de forma incomprensible, chutó mordido tras una dejada de Oyarzabal.

En el descanso, Diego Martínez invocó a la rebelión con dos cambios y la Real tuvo la inteligencia y el temple para dejar hacer a los pericos, permitir que se crecieran  para matarles en rápidas transiciones. Y así fue, antes siquiera de empezar a soñar con la remontada ya tenían el segundo en la buchaca. Obra de Sorloth, que culminó una jugada espléndida que inició Rico, enriqueció Zubimendi para encontrar a Illarra y terminó de dar aroma a gol Oyarzabal con una magistral asistencia. Fútbol champán.

El Espanyol se mete en el partido
Lo que parecía la sentencia llegó sólo nueve minutos más tarde, producto del estado de éxtasis de los donostiarras y de abatimiento de los locales. El centro de Kubo era oro, pero fue Cabrera el que lo terminó rematando a gol.  Pero no fue el final, ni mucho menos.

El Espanyol se vino arriba con los cambios y en un arranque de coraje se metió en un partido en el que parecía muerto. Marcó Darder después de un paradón de Remiro tras un cabezazo de Puado.  No pasaba nada, salvo que la Real había perdido el control, hasta que Oliván le pilló la espalda a Sola y clavó el segundo.

Hubo que sufrir en un duelo que era un paseo, pero mereció la pena.



Imagen y reseña recogidas de Spoiler



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