El Sevilla se hace fuerte en casa

El equipo de Sampaoli se quita el mal sabor de boca por la imagen ofrecida en el Camp Nou


El Sevilla sumó su cuarto triunfo consecutivo en el Sánchez-Pizjuán ante el Mallorca para volver a escapar de la zona de peligro, situarse en la zona media de la tabla y quitarse el mal sabor de boca por la pésima imagen ofrecida en el Camp Nou hace justo una semana. En una buena primera parte, posiblemente la mejor desde que Jorge Sampaoli es entrenador de los blancos, el equipo andaluz despachó a un temeroso rival que se colgó del larguero desde el minuto uno. Los goles de En-Nesyri y Bryan Gil abrieron el camino de la victoria a los pupilos del técnico argentino, que han sacado adelante los cuatro últimos compromisos caseros ante rivales de la zona media-baja: Getafe, Cádiz, Elche y Mallorca. El equipo de Javier Aguirre, que llegaba con el aval de haber vencido al Real Madrid en Son Moix, dejó una pobre imagen ante un adversario que se mostró muy superior y que hizo disfrutar a una afición que lleva tiempo sufriendo más de necesario.

Sampaoli planteó una pequeña revolución en su once titular con la presencia de Jesús Navas, recién recuperado de una lesión, y Bryan Gil en los carriles, convirtiéndose ambos en decisivos en un primer tiempo de acoso y derribo constante en el área balear. Junto con el franco-senegalés Pape Guaye, otro de los últimos refuerzos llegados en el mercado de enero, dinamizaron un ataque que también tenía con buen tono en la referencia ofensiva a un En-Nesyri que ya avisó a los 20 minutos con un gran remate de cabeza a pase de Navas que sacó de forma milagrosa Rajkovic. Sin embargo, no perdonaría el marroquí tras un pase espectacular de Gueye que lo dejó solo ante el meta balear, a quien batió por bajo. El Sevilla pudo aumentar su ventaja en un zurdazo de Suso que sacó Rajkovic, que se vería otra vez superado en un ataque de los locales culminado por Bryan Gil a puerta vacía. El barbateño marcaba su primer tanto desde su regreso desde el Tottenham tras una excelente combinación colectiva iniciada en los pies de Bono con una excelente apertura de En-Nesyri y un gran pase de Navas.

La afición sevillista se iba al descanso satisfecha con lo ofrecido por su equipo, que no obstante en el segundo tiempo salió con una marcha menos con la tranquilidad de una cómoda ventaja. Los baleares se estiraron algo en busca de un Muriqi hasta entonces desasistido, pero esa mejoría no les dio para inquietar a un equipo que se siente cómodo en casa. Un balón que sacó Gudelj de cabeza casi en la escuadra y una falta botada por Kang In Lee que obligó a Bono a emplearse fue lo más peligroso de un Mallorca al que le costaba mucho llegar al área rival. Aguirre lo intentó con los cambios, pero el marcador no se movería y los puntos se quedarían en el Sánchez-Pizjuán, donde las sensaciones parecen ser más positivas en la construcción de la idea que busca Sampaoli.



Imagen y reseña recogidas de Spoiler