El Betis vapulea a la Real y se apunta a todo

Los de Manuel Pellegrini despiden uno de los mejores años de su historia en el Benito Villamarín goleando a los donostiarras (4-0) y ratificando su candidatura al podio liguero


El Real Betis despidió por todo lo alto el año 2021 del Benito Villamarín dándole un soberano repaso a la Real Sociedad y presentando su candidatura para lo que haga falta en esta Liga tan igualada. Los de Pellegrini brindaron un partido soberbio ante los donostiarras (4-0), hasta hace poco lideres de la categoría, a los que desarbolaron por completo a base de un tremendo orden defensivo, al comienzo, y una extraordinaria efectividad de sus talentosos futbolistas ofensivos, que transformaron en gol cuatro de los cinco remates entre los tres palos, liderados por un Álex Moreno desatado y un Juanmi en estado de gracia que convierte en oro todo lo que toca desde hace unos meses acá. Esta vez no marcó Willian José, pero su partido fue superlativo ante sus ex, siendo el primer defensor cuando tocaba defender y un asistente de lujo a la hora de filtrar pases en ataque.

El jueves en Glasgow la unidad B del Betis se hartó de fallar goles ante el Celtic, pero la A no tuvo compasión este domingo de una Real que se dejó las higadillas ante el PSV para clasificarse en la Liga Europa. Los de Imanol regalaron el 1-0 muy pronto, tras un error grosero del meta Alex Remiro al salir alocadamente del área, lo que permitió a su tocayo Álex Moreno (13’) poner al Betis con una mínima ventaja que supo mantener con orden y disciplina hasta el descanso.

A la vuelta del mismo, el actual gran ídolo de la afición bética -Juanmiguel- desató la locura en el Villamarín al cabecear de manera certera en el 55’ un templado centro de Álex Moreno al que había puesto en ventaja Fekir con un pase de categoría.

Con el 2-0 se desató la fiesta en el Benito Villamarín, la Real bajó los brazos y entre Fekir y Alex Moreno pusieron broche de oro a uno de los mejores años que se le recuerdan al Real Betis en toda su historia, igualando el record de victorias y lo que es aún mejor, enamorando a la afición con su fútbol vistoso, descarado y efectivo.



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El Real Betis está de dulce, ganar en el Camp Nou y meterle 4 a la Real Sociedad, es de Champions.

Empanada del Español ante un letal Celta

El equipo de Vicente Moreno volvió a naufragar a domicilio y salió escaldado merecidamente de Vigo por un inapelable 3-1. La falta de concentración en el arranque de cada periodo condenó a un equipo perico que sigue en caída libre lejos de casa. Santi Mina, Aspas y Denis marcaron los goles celestes y Loren firmó el único perico, una diana espectacular que de nada sirvió para borrar el pésimo duelo de los catalanes


Empanada y de las importantes la que sufrió este viernes el Espanyol en Balaídos. El equipo perico sucumbió de forma totalmente merecida ante el Celta por un inapelable 3-0 y sigue muy negado a domicilio, paseando además hoy una de las peores imágenes en lo que llevamos de Liga. Blando atrás, nulo en la medular por la buena presión local y sin pegada.

Una alarmante falta de concentración en el inicio de cada periodo sentenció a los pericos. Santi Mina abrió el marcador en el 3’ y Aspas hizo el 2-0 en el 47’, aprovechando una desquiciante laguna en la zaga perica en sendas acciones. Denis Suárez hizo el tercero local en una segunda parte de dominio celeste y Loren firmó el de la honra de los catalanes, un golazo que de nada sirvió para mitigar el triste papel de los blanquiazules en Vigo. Mucho a corregir pues comienza a ser alarmante cómo puede cambiar tanto el Espanyol del RCDE Stadium con el que naufraga lejos de Barcelona.

El Espanyol sigue negado fuera de casa, falto de competitividad y recursos, y da alas a un Celta que hasta este viernes, era de lo peor de la Liga cuando jugaba como local. Pero lo redimió el Espanyol.

Vicente Moreno sacudió su once de salida, dejando a Embarba en el banquillo, por primera vez en la Liga, y adelantó a Aleix Vidal como extremo diestro. Mientras que Miguelón volvió a ser titular después de nueve meses.

No pudo empezar peor el partido para los pericos, empanados en el arranque. No se había llegado al minuto 3 cuando una rápida combinación entre Aspas y Santi Mina acabó con el gol del último, definiendo de lujo al aprovechar la lentitud de toda la zaga perica. Jarrón de agua fría en toda la frente.

La tempranera diana desestabilizó a los de Vicente Moreno, incapaces de contrarrestar el dominio local, un Celta que tocaba con demasiada comodidad y asustaba cada vez que se acercaba a los dominios de Diego López. Puado y RDT se asociaron en el 7’ pero el disparo no se dio entre los tres palos.

La primera media hora del Espanyol fue para olvidar. El Celta se dedicó a triangular y llegó fácil y no hizo el segundo gol por el buen hacer de Cabrera. Providencial fue el ‘Lele’ en el 37’ cuando se interpuso para cotar la entrada de Brais Méndez, tras un pase filtrado de Aspas. Precisamente Brais tuvo en el segundo en el 41’ pero su zurdazo seco, sin oposición alguna, salió lamiendo el palo.

Mientras tanto el Espanyol no existía en ataque. Melendo, inocuo, no conectaba con Darder y de rebote, los puntas se perdían en la nada. La creación ofensiva brilló y ni RDT tuvo alguna chance, más sólo que una isla, al igual que Puado, perdido en desmarques. Y atrás tampoco mejoró el balance, pues los defensas nunca lograron ajustar las marcas, dando mucha guerra el triángulo formado por Aspas, Brais y Mina.

Y cuando el duelo llegaba al descanso, el Espanyol, en la única aproximación peligrosa, el único disparo entre los 3 palos, tuvo el empate. Javi Puado (44’) no logró culminar la contra, tras la asistencia de Aleix, pues el meta Dituro le robó la cartera in extremis.

El Espanyol repitió el lamentable arranque del partido en la reanudación. En el 47’, una jugada combinada con comodidad por la delantera celeste acabó con un gol de Aspas, que aprovechó que Pedrosa le dejó perfilarse sin problemas. Nueva bofetada tempranera.



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El Rayo también atropella al Alavés

Con dos goles en el primer tiempo, obra de Sergi Guardiola y Catena, los vallecanos siguen mostrándose intratables en casa y agravan la situación de los vitorianos


El Rayo sigue intratable en casa: diez partidos, ocho triunfos y dos empates. En esta ocasión ha sido el Alavés la ‘víctima’ de los de Andoni Iraola, que siguen atropellando a todos aquellos que se asoman por Vallecas. Le han bastado a los madrileños los primeros 45 minutos para sentenciar con dos goles de Sergi Guardiola y Catena el encuentro.

Fiel a su estilo de presión, velocidad y máxima intensidad, el Rayo ha pasado por encima de un Alavés que nunca ha estado cómodo en el césped del feudo vallecano y que ve agravada su posición en la tabla clasificatoria, no logrando alejarse de la zona de descenso.

Poco necesita el Rayo de Andoni Iraola para crear peligro: a los 5 minutos Álvaro García ya había llegado dos veces por su banda izquierda, primero al aprovechar una pérdida de la defensa vitoriana y la segunda, en una contra conducida por Comesaña. No ha fructificado ninguna de las dos, pero han servido de aviso para un Alavés que ha salido a cederle la iniciativa a los locales, consciente de que con espacios su peligrosidad aumenta exponencialmente.

El Alavés, sin el balón
A los vascos apenas les duraba el balón en las botas ante un Rayo que también sabía tocar buscando su oportunidad, huyendo del vértigo. Pero en una de estas Rioja ha interceptado un mal pase de Catena, adelantado unos metros y soltado un zurdazo desde más de 20 metros para el lucimiento de Dimitrievski, que ha mandado a córner a los 15. Era el primer aviso de un Alavés huérfano de la iniciativa del juego.

No se ha demorado la reacción del Rayo, que a los 19 estrenaba el marcador por medio de Sergi Guardiola, al aprovechar con la diestra un centro desde la izquierda de Álvaro García y cuyo remate fue validado tras ser revisado por el VAR.

Y sin apenas tiempo de transición, siete minutos después ha llegado el segundo, obra de Catena de cabeza a la salida de un córner. Un tanto que además entra en la pequeña historia del cuadro vallecano, al ser el número 500 del equipo como local en Primera División.

La diana ha envalentonado a un Rayo con Trejo a los mandos y ha amilanado a un Alavés consciente de que dos tantos es una ventaja muy difícil de enjugar ante un equipo como el de Iraola, voraz por las bandas, asfixiante en el centro del campo… y sin su gran referente ofensivo, el ‘Tigre’ Falcao, en el banquillo. Argumentos que han servido a los madrileños para sumar ocho triunfos y dos empates en los diez partidos que ha jugado al amparo de su propio feudo.

Lo ha intentado, aunque tímidamente, De la Fuente de cabeza a los 34, sin problemas para el meta local. Ha insistido a raíz de esa acción el Alavés, aunque ha sido Catena quien ha tenido el gol a los 38, a la salida de otro córner, si bien su remate ha muerto en las manos de Pacheco. Y lo ha intentado de nuevo Álvaro García, estrellando su derechazo en el palo vitoriano. En la contra ha sido Joselu a pase de Pere Pons quien la ha tenido, forzando la estirada del meta local. Un minuto loco que ha acabado con el cambio por lesión de Álvaro García, una auténtica pesadilla para la defensa vitoriana durante ese primer tiempo.

Arranque engañoso
Ha salido el Alavés dando un paso al frente tras el descanso, con el riesgo que eso conlleva ante un Rayo que vive cómodo a la contra. Ha sido casi un espejismo, pues enseguida el once local ha vuelto a coger la iniciativa y a retomar el discurso y dominio del periodo inicial, pese al intento aislado del recién incorporado Edgar a los 58 buscando una rosca con la zurda en un rápido contragolpe.

Trejo, el mejor rayista del partida, ha intentado ofrecer el 3-0 pero su pase atrás a los 66 no ha encontrado rematador. Sin tanta continuidad como en el primer tiempo, el Rayo ha seguido teniendo el control de un choque del que el Alavés parecía incapaz de modificar el guion, ni tan siquiera con los cambios introducidos por Javi Calleja.

El Rayo, con un desgaste físico importante, ha tirado de posesiones más largas para castigar al Alavés, prolongando las jugadas antes de ensayar el disparo.

Comesaña e Isi la han tenido en el 77, cuando Iraola ya había decidido dosificar a Trejo y a Sergi Guardiola, buscando frescura con Nteka y Unai López en el tramo final del encuentro. Por parte alavesista Calleja se ha jugado la ‘carta Pellistri’ en el cuarto de hora final.

Intentos infructuosos ante un Rayo irreductible, que se ha permitido dar minutos a Falcao en los tres finales. Los que ha jugado el colombiano mientras la afición se despedía de un partido que ha dejado a los locales momentáneamente en zona de Champions League.



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Gavi lidera la revolución de los jóvenes

Tras un brillante primer tiempo barcelonista, el Elche obligó a los azulgranas a sufrir para lograr un triunfo imprescindible con goles del debutante Jutglà, Gavi y Nico


El Camp Nou cerró un año atípico con la promesa de un futuro que no puede ser otra cosa que brillante con lo que exhibieron los jóvenes, liderados por Gavi, y con tres puntos para empezar ese cambio de dinámica en LaLiga. Un primer tiempo para soñar, para confiar en unas navidades tranquilas, y un segundo en el que se siguió sufriendo, en el que los fantasmas camparon a sus anchas durante un buen rato. Los aprendices lideraron un triunfo tan valioso e imprescindible para el Barça como sufrido. El Elche, con goles de Morente y Pere Milla, dos de los cambios de Francisco, casi amargó las fiestas a un Barça que se había avanzado en una gran primera parte de los jóvenes con tantos de Jutglà y Gavi, un gol que completó toda una exhibición del joven sevillano, líder absoluto de la victoria del Barça. En el tramo final, otro joven, Nico, puso el 3-2, un 3-2 merecido pese al sufrimiento y al que ni siquiera la entidad del Elche puede empequeñecer en su innegable valor.

Y es que el Barça de las dos caras reapareció cuando todo auguraba una feliz entrada en el cambio de dinámica que Xavi lleva días reclamando. Un primer tiempo brillante, prometedor, con grandes momentos de los cachorros, sobre todo de un Gavi sublime y un Jutglà que demostró que quiere ganarse el puesto, hizo soñar a los aficionados barcelonistas con un cambio de rumbo en la temporada como regalo avanzado de Reyes. En el segundo tiempo reapareció el equipo inestable, incapaz de controlar un marcador a favor ni ante un Elche muy necesitado de puntos y de goles.

Por lo visto en la primera parte, el Barça se estaba ganando una tarde tranquila gracias a la frescura de Jutglà en su primer partido en el Camp Nou, que afrontó sin complejos, y un Gavi que, ubicado como mediapunta, se erigió en líder del juego del equipo de Xavi, que hizo sus apuestas y le salieron bien, especialmente la de poner a Jutglà, un extremo de fábrica, como ‘nueve’.

Jutglà fue, efectivamente, la gran sorpresa de la alineación. Ubicado como teórico delantero centro, con Dembélé a la derecha y Abde a la izquierda aportando desequilibrio, el ‘casi debutante’ (jugó los minutos finales en Pamplona) tardó un par de minutos en arcar: cogió una asistencia al espacio de Gavi, controló y definió a la perfección. Pero en fuera de juego milimétrico en el momento del pase.

La exhibición de Gavi

Al cuarto de hora, Jutglà repitió y esta vez no se lo anularon: córner que lanzó Dembélé, saltó Araujo sin llegar y ahí estaba Jutglà para marcar de cabeza su primer gol con el Barça. El gol asentó al Barça en el partido y le dio alas. Ni tres minutos después, llegó uno de los grandes momentos de la tarde: golazo de Gavi, que recogió un balón en el centro del campo, eliminó a un rival con un golpe de cadera y encaró a Enzo Roco, al que dribló en carrera para entrar en el área y lanzar un disparo que se coló ajustado al poste derecho.

Gavi fue la pieza clave de la fase de creación barcelonista, como mediapunta en el 3-4-3 que Xavi dispuso en ataque, con tres centrales y Alba como interior izquierdo. En fase defensiva, Alba retrasaba su posición para establecer una defensa de cuatro. El sevillano remató alto por muy poco tras recoger un balón en el área e irse de su par con una media vuelta. Y poco después, Jutglà se iba al espacio y recogía un gran pase de Dembélé, pero el central Diego González le cerró bien paso y le hizo rematar algo forzado. Abde también lo intentó, al coger un balón del ‘interior’ Jordi Alba, irse e intentar el remate. Los jóvenes hacían que el Camp Nou se divirtiese. Y podría haberse completado la fiesta con otra gran acción de Gavi justo antes del descanso.

Ciertamente, el Elche generó algunas dificultades a la contra y en jugadas de estrategia: en una de ellas, Enzo Roco llegó al área pequeña y ganó la espalda a un despistado Lenglet, pero remató alto cuando lo tenía todo a favor. La alegría atacante se convertía en un punto de sufrimiento para Eric y Lenglet cuando los dos Lucas de la delantera del Elche buscaban los desmarques o cuando subía a rematar el central Roco.

El lado 'Grinch' del Barça

Estas pequeñas sombras se convirtieron en tinieblas en la segunda parte, cuando al Barça le salió el ‘Grinch’ que lleva dentro, para fastidiar las Navidades. El Elche introdujo cambios para tratar de entrar en el partido y, entre esos cambios y que el Barça salió tras el descanso con menos revoluciones que en el primer tiempo, el conjunto ilicitano comenzó a acercarse, con incursiones de Mojica, que protagonizó un gran duelo con Dembélé, desde la izquierda o del recién incorporado Morente por la derecha, que buscaban a Lucas Boyé o Lucas Pérez.

Pese a que la conexión Gavi-Jutglà seguía en funcionamiento y una gran acción del sevillano entre líneas encontró al delantero perfectamente desmarcado y presto para meterse en diagonal en el área y lanzar otro remate que rechazó Edgar Badia, el Elche se había metido en el partido y en dos minutos devolvió al Barça al purgatorio.

Primero, Tete Morente remató a gol una gran transición del Elche por la izquierda, iniciada en una pérdida de Dembélé y acción de Mojica. Y, casi a continuación y sin dejar que el Barça se rehiciese, Morente se metió por la derecha y lanzó un centro para que Pere Milla, solo en el área pequeña, cabecease a gol.

Un doble chut de Nico, que entró sorprendentemente por Jutglà, el primero sacado por Mojica bajo los palos y el segundo detenido por Badia, casi vuelven a poner por delante al Barça. Finalmente, Nico marcó a pase del omnipresente Gavi el tercer gol del Barça, tras pared con Dembélé, que en el tramo final intercambió las bandas con Abde. El Elche reclamó mano de Gavi

FICHA TÉCNICA

FC BARCELONA: Ter Stegen (1); Araujo (2), Eric (2), Lenglet (2), Jordi Alba (2); De Jong (2) (Riqui Puig (1), 76’), Sergio Busquets (2), Gavi (4); Dembélé (2), Jutglà (4) (Nico (3), 71’), Abde (3) (Balde (s.c.), 88’)

ELCHE CF: Edgar Badia (2); Palacios (1), Roco (1), Diego González (2), Mojica (3) (Josema (1), 81’); Josan (1) (Morente (4), 46’), Ivan Marcone (1) (Gumbau (2), 46’), Mascarell (2) (Raúl Guti (2), 60’), Fidel (2) (Pere Milla (3), 60’); Lucas Pérez (2), Lucas Boyé (3)

GOLES: 1-0, Jutglà (15’); 2-0, Gavi (18’); 2-1, Morente (61’); 2-2, Pere Milla (63’); 3-2, Nico (85’)

ÁRBITRO: Alberola Rojas, Comité castellano-manchego. Tarjetas a Pere Milla (71’), Gumbau (77’), Eric Garcia (79’), Roco (86’)

ESPECTADORES: 41.664 en el Camp Nou

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El Athletic llega a tiempo de remontar frente al enrachado Betis

- Williams adelantó a los locales en el minuto 2, pero Juanmi empató acto seguido y Fekir firmó el 1-2 a la vuelta del descanso
 - El propio Williams y De Marcos, con un tiro que rebotó en Víctor Ruiz, firmaron la remontada bilbaína cuando más tocado parecía el equipo bilbaíno


El Athletic volvió a cantar victoria tras ocho jornadas consecutivas sin hacerlo tras derrotar en San Mamés a un Betis que acumulaba cuatro encuentros ligueros seguidos ganados. Los leones se adelantaron pronto en el marcador por medio de Iñaki Williams, pero Juanmi empató acto seguido y Fekir hizo el 1-2 a la vuelta del descanso. Todo apuntaba a derrota bilbaína cuando el propio Williams y De Marcos, con rebote previo del balón en Víctor Ruiz, firmaron el 3-2 en la recta final del choque.

Los de Pellegrini controlaron la situación hasta prácticamente el minuto 72. El cambio de Guido, con tarjeta, por Edgar desequilibró al cuadro visitante a la vez que las sustituciones de Marcelino dieron otro aire a un conjunto rojiblanco que parecía estar derrotado. El empuje local acabó dando sus frutos, aunque los visitantes volvieron a la carga y a punto estuvieron de empatar en el tiempo de prolongación.

El míster del Athletic afrontó este envite con tres cambios respecto a la alineación que presentó días antes frente al Sevilla. Los tres eran obligados dadas las ausencias de Unai Simón e Iñigo Martínez, por positivo en Covid, y de Dani García, por sanción. Agirrezabala, Nuñez y Vesga ocuparon sus puestos.

Pellegrini apenas varió el once titular respecto al que venía de golear en Liga a la Real en el Villamarín. Tanto solo una modificación. William ocupó en Bilbao la vacante del esta vez ausente Guardado.

El encuentro de San Mamés, con dos equipos inmersos en dinámicas muy diferentes, se puso pronto de cara para los leones. Iñaki Williams aprovechó en el minuto 2 un balón al hueco de Muniain para batir a Rui Silva. El árbitro, tras previa revisión del VAR, dio por bueno el tanto al estimar que Víctor Ruiz habilitaba por centímetros al goleador local.

La reacción verdiblanca apenas se hizo esperar. Juanmi, en plena racha realizadora, aprovechó cuatro minutos más tarde una dejada de cabeza de Alex Moreno tras gran cambio de juego de Canales para establecer el 1-1.  Los leones aprovecharon ese ímpetu ofensivo de los béticos para probar suerte al contraataque. Los hermanos Williams, con pase del mayor al que el pequeño no llegó, rozaron el gol acto seguido.

Este vibrante arranque de choque fue difuminándose de manera paulatina. Athletic y Betis intensificaron su ritmo a la hora de defender y dejaron las alegrías para mejor ocasión. La igualdad imperó hasta el descanso sin ya oportunidades de gol relevantes por ambas partes.

El conjunto visitante salió con aire renovado tras el intermedio. Fekir puso pronto a prueba a Agirrezabala. Willian José perdonó poco después. Fekir, sin embargo, acertó al tercer intento y firmó el 1-2 con un espléndido zurdazo.

Marcelino, consciente de la situación,buscó soluciones en el banquillo. De Marcos y Zarraga fueron sus primeras apuestas. Berenguer y Sancet salieron un poco más tarde. Iñaki Williams, cuando el partido más controlado parecía por parte visitante, estableció la igualada con un espléndido zapatazo con la zurda. Rui Silva evitó males mayores acto seguido a su equipo en sendas acciones ante De Marcos y el propio bigoleador rojiblanco.

El Athletic fue a más a medida que el Betis empezaba a perder sitio en el campo. Pellegrini, que primero había retirado a Guido, recurrió a Rodri y después, de forma simultánea, a Miranda, Joaquín y Borja Iglesias. Morcillo fue la última incorporación local.

La insistencia rojiblanca acabó dando sus frutos cerca del minuto 90. Una trabajada jugada atacante de los leones culminó con un tiro de De Marcos que se coló en la portería verdiblanca tras un rebote previo del balón en Víctor Ruiz. Los leones tuvieron que sufrir hasta el final para poder cantar victoria.

Ficha Técnica

ATHLETIC CLUB | Agirrezabala - Lekue, Nuñez, Yeray, Balenziaga - Nico, Vencedor, Vesga, Muniain - Raúl García y Williams

Banquillo | Ezkieta (ps), Petxarroman, Berenguer, Sancet, Morcillo, De Marcos, Zarraga, Capa y Paredes

BETIS | Rui Silva - Bellerín, Bartra, Víctor Ruiz, Moreno - Guido, Carvalho . Canales, Fekir, Juanmi - Willian José

Banquillo | Joal (ps), Bravo (ps), Miranda, Rodri, Rober, Ruibal, Joaquín, Edgar, Lainez, Tello e Iglesias

Goles | Williams (2' y 72') y De Marcos (89') - Juanmi (7') y Fekir (53')
Posesión | 43% - 57%
Remates | 9 - 16
Remates  a  puerta | 6 - 8
Córners | 5 - 6
Tarjetas  amarillas | Zarraga - Fekir y Guido

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