Re:NUESTROS PUEBLOS Y CIUDADES .



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Autor Tema: NUESTROS PUEBLOS Y CIUDADES  (Leído 246379 veces)

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Re:NUESTROS PUEBLOS Y CIUDADES
« en: 17 de Diciembre de 2022, 16:14:54 16:14 »

Higuera de Calatrava

Higuera de Calatrava es un municipio español de la provincia de Jaén, Andalucía. Situado a 46 Kilómetros de la capital de provincia. Higuera de Calatrava posee una población de 601 habitantes (2021), con una superficie de 39,3 km², su densidad de población es de 15,83 hab./km².

Ubicado a una altitud de 374 msnm, sus coordenadas geográficas son: 37°47′55″N 4°09′28″O.

El término municipal de Higuera de Calatrava se encuentra enclavado en la extensa área conocida como campiña de Martos y se caracteriza por un paisaje ondulado de lomas de escasa elevación entre valles de ríos y arroyos en tránsito hacia el valle del Guadalquivir. El valle del Salado condiciona geográficamente el emplazamiento de la localidad que se posiciona en un lateral del propio valle.

Pese a la suavidad generalizada del territorio aparecen algunos accidentes geográficos a modo de precipicios de roca arenisca.

La altimetría del municipio tiene por extremos en su punto más bajo los 287 metros sobre el nivel del mar que llegan a darse en el paraje de La Hondonera hasta los 478 metros de altitud que se alcanzan en el punto geodésico Haza de la Sierra.

Historia

Prehistoria y Romanización
Se han encontrado distintos utensilios de la época del Neolítico que atestiguan la presencia humana en estas tierras desde al menos esa época. Está también documentada la aparición de trozos de cerámica ibérica, romana y árabe califal en los cortijos de Fuente Palacios y la Hondonera.

De época posterior son los restos del poblado La Atalaya (Cobre final- Bronce antiguo) donde se observan restos de fortificaciones.

A partir del sigloII a. C. toda la zona, que hasta entonces estuvo controlada por los íberos pasa a control de los turris, pueblo que tuvo su emplazamiento sobre el Cerro Castellar. Durante el control del Imperio romano e integrada en la provincia de la Bética está constatada la existencia de explotaciones agropecuarias tipo “villae” entre las que se encuentran el Cortijo El Calvo, el de los Antojos , el Cerrillo del Eco o Porras entre otros. De esta época se conserva un diploma militar que fue encontrado en el Cerro Franco del año 225 d. C.

Edad Media
El emplazamiento actual de la villa tiene su origen en una alquería árabe de la que no se conocen referencias escritas hasta la conquista cristiana.

En 1225 el rey Fernando III de Castilla toma el Castillo y la Villa de Martos mediante el Pacto de las Navas de Tolosa firmado con el Emir de Baeza Aben Mohammad alias "al-Bayyasi". En 1228 el monarca castellano dona Martos y su término a la Orden Religiosa-Militar de Calatrava mediante Carta de Privilegio Rodado y Donación n.º 62 de los documentos reales. La Orden de Calatrava designó a la Villa de Martos cabeza del partido del Andalucía, constituyéndose la Encomienda de Martos que comprendía la propia Villa de Martos, la Villa de Torreximeno, el anexo de Xamilena, el Lugar de Santiago, la Figuera de Martos,la Torre de Alcázar y de Venzalá, el Monte de Lope Álvarez, unas 200 yugadas en la heredad de Arjona y la Villa de Porcuna, este última su entrega se haría efectiva cuando fuese conquistada a los árabes. Las citadas Villas de la Encomienda de Martos se convirtieron en territorio cristiano-castellano fronterizo con el reino árabe de Granada por Jaén, Alcaudete y Alcalá la Real que aún permanecían bajo la jurisdicción del reino nazarí granadino, lo que dio lugar a continuos asedios y razzias (cabalgadas) por los ejércitos de los reyes nazaríes de Granada para tratar de dominarlas o saquearlas.

Durante el siglo XV la Higuera de Martos sufrió distintas razias de los Moros nazaríes de Granada siendo las mejor documentadas las del 1408 y 1471.

Según la Crónica del Rey Don Juan II de Castilla y León compilada por Fernán Pérez de Guzmán en el año 1779, el día 18 de febrero de del año 1408 el rey nazarí de Granada llegó al Alcaudete, bajo la monarquía castellana, con un poderoso ejército integrado por siete mil jinetes de a caballo y ciento vente mil peones (soldados de a pie,) y combatió duramente durante día y noche el Castillo, sin poder tomarlo ya que era defendido por Martín Alonso de Montemayor y su ejército con gran bravura, repeliendo el ataque, aunque no pudieron evitar que talaran la rica vega de viñas, huertas y olivares. Como los nazaríes necesitaban provisiones para mantener su ejército y continuar el asedio a Alcaudete, el rey de Granada envió mil jinetes de a caballo y muchos más soldados de a pie a la Villa de Alvendin para traer pan (trigo). Enterados el Alcalde de Baena, el Alcalde de los Donceles y el Obispo de Córdoba de la llegada de los Moros a Alvendín, acudieron con sus caballeros en socorro de este población, pero al llegar otros muchos Moros de a caballo y a pie procedentes del real de Alcaudete, los caballeros castellanos de Baena, los Donceles y Córdoba tuvieron que regresar a sus cuarteles sin poder impedir el paso de los Moros, dado el elevado número de efectivos de su ejército.

Continua la Crónica de Rey Juan II de Castilla, con el literal siguiente en su gramática original:

"Y el 22 de febrero de 1408, que fue día de San Pedro de Cátedra, habían salido del real de Alcaudete otros dos mil jinetes de a caballo, los cuales se repartieron, los unos fueron contra la Figuera de Martos, e los otros se pusieron al Salado, e partiéronse dellos hasta trescientos de a caballo e fuerónse contra la torre que dicen de los alárabes. Y estando cargando pan (trigo) en la Figuera, los Moros que ende eran idos, fue la voz al Conde Don Fabrique que estaba en Porcuna a una legua de la Figuera donde los Moros estaban. E luego el Conde hizo repicar las campanas e mandó poner su bandera en el campo y él se armaba en tanto que la gente se llegaba. E Luis Mexía e Ruy Barba, su hermano, con hasta diez a caballo fueron por donde era el rebato e como supieron que era en la Figuera fueron hasta allá e vieron como los moros ponían fuego al lugar, e pusierónse en un cerro alto. Y en este tiempo llegó don Enrique hermando del Conde Don Fabrique, con hasta treinta de a caballo, entre los cueles iban Suero de Nava, e Martin Alonso de Sosa, que era portogues, e Ochoa Lopez,vizcaíno, e Luis Mexía, e Ruy Lopez, gallego, los cuales embiaron decir al Conde que anduviesen quanto pudieran porque los Moros se iban con el pan (trigo) que habían cargado en la Figuera e otros quedaban a quemar el lugar. E quando juntáronse todos, se fueron contra los Moros diciendo ¡Santiago, Santiago!, a ellos que fuyen. Y don Fabrique con los que con él estaban pasó el Salado, de manera que los Moros volvieron a fuir hasta que los llevaron en fuida hasta el Monte que dicen de Lope Álvarez e tomaron un moro ladino,(latino,que hablaba latín) del cual supieron que cerca de allí estaban bien quinientos de a caballo Moros, e más de dos mil peones... E plugo a nuestro Señor que los Moros fueron vencidos e murieron dellos de caballo e de pie bien doscientos. E allí mataron el caballo a Don Enrique e dióle otro un escudero natural de Baeza. E hubieron los cristianos el despojo de los Moros ciento e veinte azémilas e veinte caballos.E vencida esta batalla el Conde se tornó a Porcuna..."

El 29 de septiembre de 1471 los moros vuelven a entrar por Alcaudete, cuyo paso fue permitido por el Señor de Montemayor, llegando a los lugares que eran de la Orden de Calatrava. Los moros entraron en la villa arrasándola, según cuentan las crónicas murieron unos 400 vecinos y otros tantos fueron hecho cautivos. El Condestable de Castilla, Miguel Lucas de Iranzo envió una carta al Papa Sixto IV en el que relataba lo ocurrido.

“Y domingo que fueron 29 de septiembre, dia de San Miguel, del dicho ano de 71, antes que amaneciese, dieron sobre dos lugares de la dicha Orden, que al uno dicen Santiago y al otro la Figuera de Martos, que estan a una legua de la villa de Porcuna. Los quales fueron entrados y robados, y quemados de todo punto, y presos y muertos los onbres, mugeres y ninos que en ellos avia; salvo algunos que en una torre de la dicha Figuera fie salvaron. Y no perdonaron algunos onbres y mugeres que a la yglesia se retrayeron, ni a un clerigo que revestido estava... Y robaron todo el ganado que en aquella tierra avia. Fueron los cativos que levaron, entre onbres y mugeres y ninos, quatrocientas personas poco mas o menos. E los muertos tantos o mas”

Con la Reconquista de Granada la zona pierde el valor estratégico que había tenido hasta entonces y desaparece el peligro de los ataques moros. Durante esta época numerosos vecinos partirán a repoblar pueblos del antiguo Reino de Granada como Arenas , en Málaga, o Loja. Asimismo están registrados 3 vecinos que partieron hacia América durante el siglo XVI.

Edad Moderna y Contemporánea
La Higuera de Martos, apellidada así por su pertenencia a la misma, empieza a tramitar su Carta de Privilegio en la última década del siglo XVI, consiguiéndola en 1600, momento en el que pasa a denominarse Higuera de Calatrava por su pertenencia a la Orden de Calatrava.

El pueblo vivirá sin más sobresaltos de los que se tenga noticia hasta la Guerra Civil. Si bien tras la sublevación el pueblo quedaría en la zona republicana, el avance del frente en la llamada “Campaña de la Aceituna” dejó a la villa despoblada desde el 14 de diciembre de 1936. Durante la contienda el pueblo marcó el límite entre ambas zonas y ello dejó sus infraestructuras seriamente dañadas y un número importante de casas parcial o totalmente derruidas.

Finalizada la guerra, las autoridades franquistas cercaron con alambre de espino casi todo el pueblo, convirtiéndolo en un campo de concentración para prisioneros republicanos. Allí fueron recluidas más de diez mil personas. Hernández de Miguel recoge en su libro Los Campos de Concentración de Franco distintos testimonios que apuntan a que perecieron un número indeterminado de internos debido al hacinamiento y las enfermedades y que dichas muertes eran ocultadas, no habiendo constancia documental de ningún fallecimiento. Según esos mismos testimonios, los allí detenidos llegaron a estar hasta 21 días sin recibir alimento, teniendo que sobrevivir a base de raíces, hierba y los restos de comida adheridos a las calderas donde cocinaban los soldados que custodiaban el recinto.

También relatan que tenían lugar asesinatos por la noche, mayoritariamente de oficiales del Ejército republicano, que estaban confinados aparte; y que estarían enterrados en fosas comunes, aunque no hay datos sobre dichas víctimas ni ninguna fosa localizada. El campo estuvo funcionando entre abril y junio de 1939.

Una vez clausurado el campo de prisioneros, regresaron la mayoría de vecinos al municipio. En diciembre de 1939 la localidad fue adoptada por decreto a efectos de reconstrucción.10 La Dirección General de Regiones Devastadas inició las obras necesarias para instalar un nuevo ayuntamiento, mercado, escuelas, casa-cuartel de la Guardia Civil, casa rectoral y restauración de la Iglesia de la Inmaculada Concepción así como decenas de casas sociales, entre otras obras, a fin de hacer el pueblo habitable de nuevo.

Patrimonio

Histórico

Torreón
El torreón, tal y como actualmente se conserva, es de mampostería regular, con esquinas de sillarejo a soga y tizón, y contemporáneamente se le han adherido viviendas domésticas. Debió ser la torre del homenaje de un pequeño aunque fuerte castillo que cumplió funciones militares relativamente importantes a lo largo de los siglos XIII y XIV: actuó como baluarte del poder calatravo en la campiña marteña y fue protagonista en cruentas batallas como la que la tradición popular le atribuye entre el rey de Castilla y el de Granada en 1431.

Constaba de dos pisos, del que permanece el inferior, con una estrecha puerta de acceso con arco de medio punto conformado con grandes dovelas, que contrastan con la reducida dimensión, por motivos de seguridad, del hueco de entrada. Esta puerta, una ventana y los restos de otro arco, son los pocos elementos significativos que todavía pueden apreciarse.

Fue declarado Bien de Interés Cultural en 1985.

Iglesia Parroquial de la Inmaculada Concepción
Su origen es medieval tal y como puede apreciarse en su interior, donde, a pesar de las múltiples reformas y restauraciones que se han efectuado a lo largo del tiempo, conserva claros vestigios del gótico tardío tales como las columnas helicoidales, en línea con las del gótico levantino "otras imitándolas se han añadido en la segunda mitad del siglo XX", el arco de acceso al presbiterio, levemente apuntado, o la bóveda de crucería. También conserva en su interior huellas del barroco, como el retablo. En el exterior, su fachada lateral es renacentista, aunque se reconstruyó en 1908. Presenta una sencilla puerta adintelada con arco de medio punto y paramento liso, y se abre a una amplia plaza presidida por una fuente. La fachada principal, en cambio, es barroca, aunque también reconstruida. Su puerta es asimismo adintelada, pero sin el arco de medio punto, y consta de pilastras laterales, friso sin ornamentos, frontón curvo con hornacina central y pequeños chapiteles que coronan el conjunto. Una espadaña con dos huecos para campanas remata esta fachada principal.

Casa del Párroco
Anexionada a la iglesia por el costado contrario a la plaza, la Casa del Párroco es representativa del barroco popular del siglo XVII. Muestra una peculiar estructura de entrantes y salientes, creando a su vez juegos ópticos y perspectívicos por sus formas quebradas y angulosidad. Llama la atención el orden asimétrico y la variedad de sus huecos, que van desde la puerta adintelada y los ventanales y el balcón rectangulares a las ventanitas escarzanas del sobrado, pasando por la ventana circular intermedia.

Otros monumentos
Se conservan varias casas renacentistas en la plaza de España y calles próximas (aunque algunas presentan un estado ruinoso o añadidos posteriores) que evocan la pasada grandiosidad a través de sus pétreas puertas adinteladas, con pilastras sobre pedestales, y que exhiben escudos que muestran su relación con la Orden de Calatrava.

Natural

Fuente Palacios
Este enclave natural, denominado también "San Isidro", presenta preciosas vistas, debido especialmente a la presencia de una gran arboleda. Dispone de un buen nivel de equipamientos para el esparcimiento y recreo.
Emplazamiento: Al sur del casco urbano, muy cerca del mismo.
Distancia: 400 m.
Medio: En vehículo turismo y a pie.
Vía de acceso: Saliendo del casco urbano por la J-2.110 en dirección a Santiago de Calatrava.



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