Santa Bárbara de Casa

Santa Bárbara de Casa es un municipio español que pertenece a la comarca del Andévalo de la provincia de Huelva.
En el año 2021 tenia una población de 1055 habitantes. Con una superficie de 146,59 km², lo que le lleva a tener una densidad de población de 7,45 hab./km².

Situado a una distancia de la capital de provincia de 82 kilómetros, su altitud es de 316 msnm, y sus coordenadas geográficas son: 37°47′44″N 7°11′19″O.

Historia
El poblamiento de Santa Bárbara de Casa se inició en el Calcolítico, como muestra el yacimiento de La Zarcita. Este enclave se encuentra al oeste del pueblo en dirección a Paymogo. En las cercanías se levanta el poblado fortificado de la misma época, denominado El Cabezo de los Vientos (Pinon Varela, 1987), que está fortificado con baluartes. Fuera de la ciudadela había cabañas circulares y zócalos de ladrillo dispuestos alrededor de la plaza del pueblo. El yacimiento comprende cuatro enterramientos: el Cabezo del Molino, cámara circular, coronada por una falsa cúpula y corredor; el Cabezo de la Suerte del Bizco, similar a la estructura anterior; el Charco del Toro, que tiene 2,80 m. de diámetro, colocadas en un montículo circular; y La Zarcita, o Cabezo del Tesoro, un entierro revestido con delgadas láminas rectangulares de pizarra cuidadosamente tallada.

Parece que esta comunidad se desarrolló especialmente. Tuvo una economía rural básica, y estuvo asociada a otras culturas, como lo demuestra el hacha de cobre descubierta en la cámara funeraria de “La Zarcita”.

Los árabes dejaron claras huellas de su paso dentro de las fronteras, como el castillo-fortaleza de la finca Zurita. Estuvo incluida en la Cora de Niebla, hasta que Alfonso X conquistó esa ciudad tras nueve meses y medio de asedio en 1262. Posteriormente pasó a ser dominio de la familia Guzmán, que se inició con don Juan Alonso Pérez de Guzmán, en el finales del siglo XIV. Fue uno de sus descendientes, Don Juan de Guzmán III (1436-1468), quien ganó el título de duque de Medina Sidonia (1445) por defender Sevilla . Llegó a poseer tierras desde el río Guadiana hasta Almonte, incluida la futura Santa Bárbara, a pesar de los intentos de la ciudad de Sevilla de ponerlas bajo la jurisdicción de Andévalo.

En el primer cuarto del siglo XV, el Campo de Andévalo seguía siendo una zona de colonización, pero la creación de nuevos pueblos era difícil (Sancha, F., 1992). Por estas fechas se intentó poblar El Hornillo y Los Palacios, núcleos de la futura “Santa Bárvola”, nombre que recibió la villa tras la reconquista cristiana (Gordon y Rhustaller, 1992).

Sin embargo, no aparece la primera prueba escrita hasta 1500, testimoniando que los vecinos de lugares como “Los Palacios”, “El Hornillo” y otros, individualmente, y Don Gonzalo Gómez, Domingo Martín y Don Diego Pérez, acudieron al Duque. de Medina Sidonia y Conde de Niebla, en súplica, para que, siendo un barrio bastante grande donde vivieron más de 100 años, pidieran un prado alrededor del pueblo en el que pudieran pastar sus ganados y hacer corrales para el trigo (Anónimo, 1948).

El Duque envió al Gobernador de la Ciudad de Niebla a tomar nota de las fronteras, e informar a los pueblos vecinos. En desacuerdo, protestaron ante el duque y sus descendientes. El deslinde definitivo se hizo el 5 de diciembre de 1550, disponiéndose en adelante que el lugar se denomine Santa Bárvola. Este nombre se cambió por el de Santa Bárbara de Hornillos hasta el 12 de octubre de 1916 cuando se le dio al pueblo el nombre de Santa Bárbara de Casa, en alusión al arroyo que corre cerca del pueblo.

Pronto, Santa Bárbara de Casa enfrentó las constantes incursiones de portugueses que luchaban por su independencia. En 1643, la ciudad fue asaltada. saqueada y saqueada por los lusos, huyendo los habitantes a la Sierra y regresando más tarde en 1650. La persistencia de los saqueos hizo que se marcharan en otras épocas.

Estas disputas también afectaron el ritmo de la economía, ya que los santaberberenses sembraron cereal en las fincas 'Paladares” y “La Negrita” en el vecino reino de Portugal, que cerró sus fronteras en época de cosecha, lo que les hizo perder toda la cosecha. Estos hechos políticos y económicos llevaron a que toda la Andevaleña fuera objeto de una sangrienta despoblación.

El siglo XVIII fue de relativa prosperidad, lo que dio lugar a una población creciente cuyo declive no se produjo hasta finales del siglo XIX. Sin embargo, la vida en el siglo XVIII no fue fácil, como lo demuestra la persistencia del contrabando, que dio lugar a numerosos bandoleros y delincuentes. Las posteriores órdenes reales dan testimonio de esta situación. En 1754 se dictaron órdenes “contra contrabandistas y delincuentes” (AMSB, leg, 21).

En el siglo XIX, como afirma Madoz (1845), Santa Bárbara pertenecía al Partido Judicial del Cerro, pero la renta se administraba desde la Puebla de Guzmán. La población, de unos 640 habitantes, estaba situada a la izquierda del pequeño río “Casa”, sobre un pequeño cerro. Santa Bárbara contaba con 168 casas, una aduana de primera clase con Portugal, una “posita”, una escuela primaria y una iglesia parroquial bajo la advocación de Nuestra Señora de la Merced.

Al igual que los pueblos de alrededor, se asienta sobre la penillanura de Sierra Morena. El 83,6 por ciento de sus tierras son rocas metamórficas que sobresalen y forman tierras pobres. En sus límites, Santa Bárbara, según su formación geomorfológica, comprende cuatro unidades paisajísticas bien diferenciadas: el Noreste, la Sierra Pelada, la Planicie Central y las montañas del Sur.

En este ecosistema en precario equilibrio, se pueden encontrar aves como la perdiz, el zorzal, la codorniz, la paloma, la tórtola, el azur, la garza real, la red, la curruca, el abadejo, el herrerillo, el ruiseñor, el mirlo, la corneja, la urraca y el arrendajo. Los mamíferos incluyen conejos, jabalíes y zorros. Como visitante ocasional se puede ver el buitre negro anidando en los Picos de Aroche.

Algunas áreas naturales de interés paisajísticamente sobresalientes muestran la belleza y las ventajas de las áreas. Así, la Rivera del Chanza, considerada Área Forestal de Interés Ambiental, y la Dehesa de Santa Bárbara, catalogada como Paisaje Agrícola Singular, tienen un fuerte atractivo para el turismo rural y ecológico.

Monumentos o sitios de interés
Dolmen de La Zarcita: El Patrimonio Histórico de Santa Bárbara de Casa cuenta con el yacimiento arqueológico de La Zarcita, cuya antigüedad se remonta al Calcolítico y donde se descubrieron un dolmen, un poblado y una necrópolis. La necrópolis fue descubierta y estudiada a partir de los años 40, mientras que el poblado se localizó y excavó en los 80. En el año 1986 estando el poblado excavado y al descubierto, se hizo un levantamiento topográfico de toda la excavación. Este trabajo topográfico fue encargado por el arqueólogo Fernando Piñón Varela directamente al topógrafo. Y se desarrolló por topografía clásica, reflejándose con gran precisión todos los detalles que se encontraban al descubierto. Posteriormente se realizó otro trabajo topográfico más extenso, en el que se recogía toda la extensión de la zona de La Zarcita y La Raña. Este último se realizó mediante puntos de apoyos. La restitución fotogramétrica del trabajo se realizó en Sevilla. Estos trabajos topográficos fueron realizados por el topógrafo José C. Martín. Los restos arqueológicos encontrados los podemos visitar en el Museo Provincial de Huelva.
Molinos harineros de agua y de viento: Los molinos de viento se sitúan en los cerros próximos al municipio para aprovechar los vientos que vienen del Atlántico. Los molinos hidráulicos o de agua se sitúan en el discurrir del arroyo de Casa.
Ermita de Santa Bárbara: Según los estudios del historiador Félix Sancha Soria la Ermita de Santa Bárbara fue construida por los primeros habitantes establecidos en aldeas cercanas como El Hornillo y Los Palacios a principios del siglo XVI. Estos primeros pobladores necesitaron establecer un refugio espiritual cercano que había en un cerro y sobre este edificaron la actual ermita, a los pies de la cual se extiende el municipio.
Iglesia de Nuestra Señora de la Piedad: Data del último tercio del siglo XVIII. Situada en el centro neurálgico del pueblo. Construida entre los años 1769 y 1776. Obra de Ambrosio de Figueroa que proyectó un edificio de una sola nave, con bóveda de cañón, capillas hornacinas laterales, situando en los pies la capilla bautismal y la torre campanario. En el crucero trazó una bóveda semiesférica sobre pechinas y exteriormente tres portadas fueron proyectadas.
Ermita de San Sebastián: Situada a las afueras de la población se encuentra esta ermita de reciente construcción para celebrar aquí la Romería en honor al patrón de Santa Bárbara de Casa, San Sebastián.

Fiestas locales
Cabalgata de Reyes: 5 de enero.
San Sebastián: 20 de enero (patrón de Santa Bárbara de Casa).
Romería de San Sebastián: penúltimo fin de semana del mes de abril.
Pino o Pirulito de San Juan: 23 de junio.
Feria de Santa Bárbara: se suele celebrar a primeros de agosto. Antiguamente, se celebraba en septiembre pero se cambió la fecha de dicha fiesta para evitar las aguas.
Romería chica: fin de semana siguiente a la Feria.
Santa Bárbara: 4 de diciembre (patrona de Santa Bárbara de Casa).

Tradiciones
La matanza del cerdo: Se trataba de una costumbre y de una necesidad, ya que era el sustento alimenticio familiar junto con la huerta de la casa.
El fandango de Santa Bárbara o Fandango Santabarbero: Santa Bárbara de Casa es una de las cunas del fandango de Huelva y conserva uno de los estilos más antiguos de la provincia. El fandango constituía un elemento fundamental de la vida. El fandango de Santa Bárbara se caracteriza por su lentitud melismática, que permite una interpretación más libre del compás.
El cante y baile de la Jotilla: Junto al fandango en Santa Bárbara de Casa se conservan distintas músicas, destacando "la jotilla", junto a seguidillas, la folia, las tonas de trilla, los cantes de Nochebuena y el baile de la sonaja. La jotilla tiene sus propias letras y se baila por parejas mixtas, que muestran al principio su enfado bailando con la pareja contraria, pero finalmente hacen las paces y terminan unidos. Los trajes que portan las mujeres están formados por camisa blanca con mangas largas con cuello de encaje, lazo rojo, chaleco granate con pasamanería dorada, falda anaranjada estampada, delantal negro con puntillas de encaje y lazo del mismo color. Los hombres visten camisa blanca y cuello con tira negra, chaquetilla negra, pantalón negro y fajín rojo.

Gastronomía
La gastronomía de este lugar viene especialmente de la matanza que se realiza así como de  los platos de caza y el Revuelto de champiñones.
El rey es, por méritos propios, el cerdo ibérico: jamones y paletas de bellota, cañas de lomo, y todo tipo de embutidos (chorizos, morcones, ...).

Gentilicio   santabarbero, -a
Patrón:     San Sebastián Mártir
Patrona:   Santa Bárbara