Alcubierre

Alcubierre es un municipio de España situado en la comarca de Los Monegros, provincia de Huesca, comunidad autónoma de Aragón. Se encuentra a una distancia de 42 kilómetros de la capital de provincia.Tiene una superficie de 115,29 km², con una población de 412 habitantes (INE 2023) y le conlleva a tener una densidad de población de 3,27 hab/km².

Está ubicado a una altitud de 466​ msnm y sus coordenadas geográficas son: 41°48′30″N 0°27′06″O.

Toponimia
Alcubierre es un topónimo íbero que significa "lomas o colinas separadas". A pocos kilómetros, hay un yacimiento íbero en Puyalcalá. Hay quien sostiene que proviene del euskera “lekuberri”, que significa “sitio nuevo” como nueva ubicación.

Historia
Los ilergetes, romanos y árabes cruzaron sus caminos y acamparon por estos pagos.

Recuperada la Villa por los ejércitos de Pedro I, posiblemente en 1097, su primera mención documental está fechada en 1101, bajo su reinado, siendo designada a través de los tiempor con los nombre de Alcoer, Alcoario, Alcovierre y Alcubierre.

El siglo XIII supuso una época de cambios en sus señores temporales: así, en 1200, el Rey Pedro II la dio a Pedro de Aresa a cambio del castillo de Sora, en las Cinco Villas; recobrada luego por Jaime I, éste la permutó a Bertrán de Ahones por la Honor del Valle de Vió, y en 14 de julio de 1293, fue entregada por Jaime II a Artal de Luna, en permuta con los poblados de Alcaine y Oliete, en las tierras turolenses de Alcañiz.

De los descendientes de los Luna pasó después a los Condes de Sástago –título otorgado en 1511 por Fernando el Católico a Blasco de Alagón y Lanuza, Ricohombre y Camarlengo del Reino de Aragón-, quienes tuvieron el Señorío hasta la desaparición de éstos en el siglo IXI. En 1-VII-1909 el monarca Alfonso XIII concedió el título nobiliario de Conde de Alcubierre, con Grandeza de España, a María del Pilar de Setmenat y Patiño, Despujol y Osorio, Dama de las Reinas María Cristina y Victoria Eugenia, Dama Noble de la Orden de Maria Luisa, casada en 30-VI-1883 con Joaquín Escrivá de Romaní, Marqués de Aquilar, de Monistrol de Noya y de San Dionís, Barón de Beniparrell, Maestrante de Valencia e hijo de la XV Condesa de Vástago, a la que premurió en 1897.

En Alcubierre tuvo lugar, en la guerra de la Independencia, una importante batalla en la que las tropas de Mina derrotaron a los franceses; y en una de las prominencias de la Sierra, llamada San Simón, en la de 1936, una heroica gesta en la que murieron todos los defensores, hecho singular que recuerda el monolito allí alzado; en otro vértice, la ermita de San Caprasio, entre tomillos, romeros y aliagas, es un observatorio imponente de los abiertos panoramas aragoneses del Valle del Ebro.

Flora y Fauna

Flora
Se dice que esta serranía, estaba poblada de frondosos bosques sobre todo de milenarias sabinas, y que fue talada para la construcción de las naves de la Armada Invencible a lo largo de su historia.

Asimismo, de este hecho pasado en relación a la gran calidad y espesura de sus bosques, derivó en la antigüedad el nombre de Monegros.

Como legado en la historia natural de esta zona y de dichas formaciones, cabe destacar un ejemplar, que recibe el nombre de ‘Sabina Filada Jorge’ y que forma parte del catálogo de Árboles y Arboledas singulares de Aragón.

Se trata de una sabina albar (Juniperus thurifera) con alrededor de 500 años de antigüedad, que alcanza una altura de 12 metros y un perímetro de algo más de 500 centímetros. Se encuentra en una val o ‘filada’ de la sierra monegrina. La finca, de uso agrícola, es de propiedad privada.

Con posterioridad, y principalmente durante el siglo XX, la Sierra de Alcubierre fue objeto de importantes repoblaciones forestales, en su mayoría con la especie Pinus halepensis, adaptada a las importantes condiciones de sequía de la zona, para evitar la degradación del suelo, y potenciar su recuperación como formación vegetal.

Parece algo insólito hablar de orquídeas en un entorno seco, pero en primaveras lluviosas podemos encontrarlas de forma frecuente llevándonos gratas sorpresas.

A la peculiaridad de los paisajes monegrinos y al interés de su geología, también podemos añadir la exclusividad de su botánica.

Fauna
Podemos encontrar en el entorno de Alcubierre numerosas aves, reptiles y mamíferos.
La liebre, el corzo, el zorro, jabalí o comadreja
Pequeñas especies de águilas (culebrera, aguilucho cenizo o alcotán), lechuza común, buitre leonado, abejaruco, abubilla... y un sinfín de especies que hacen del lugar un entorno para su observación
En cuanto a los reptiles se pueden encontrar la lagartija colilarga, la culebra bastarda o el galápogo leproso (es la tortuga acuática autóctona de la península ibérica)

Lugares de Interés
Son muy destacable por su interés arquitectónico, la iglesia y torre mudéjar de Alcubierre, cuyas fechas de construcción, en dos fases, se remontan a los siglos XIV y XVI, la segunda de ellas, de cuadrada planta, con tres cuerpos escalonados que reducen anchura y altura según ascienden, para rematar en otro ochavado, sobre el que vuela el chapitel, toda ella de ladrillo que forma una cuidada decoración de cruces y rombos.

Fiestas

Vieja Remolona
Alcubierre celebra el tercer miércoles de Cuaresma la denominada Vieja Remolona. El acto, de gran singularidad, tiene a los más pequeños como protagonistas. De hecho, son ellos los que recorren las calles con un objetivo: ganarse la generosidad de los vecinos y después, compartir una gran merienda. Para ello, puerta a puerta, recorren las casas del pueblo acompañados de la Vieja Remolona, un muñeco con aspecto de abuela, que suele lucir toquilla oscura, falda estampada y vistosas joyas. La elaboración del pelele corre a cargo de las madres y padres de los niños en edad escolar.

Antiguamente, los vecinos agasajaban a los niños con huevos, espedos o chullas y para ello, entonaban una popular canción: «La vieja remolona/ no quiere comer pan/ solo chocolate y chullas si le dan/ Los chicos de la escuela/ todos suplicamos/ que cuando cante el gallo/ nos den lo que buscamos/ ¡Qui-qui-ri-qui!/ ¿Nos dan para la vieja?/ ¡Con una estaca vieja!».

En la actualidad, a través de la misma canción, los niños y niñas -incorporadas de forma reciente a una tradición que antes estaba reservada solo a ellos- suelen recibir otro tipo de productos, especialmente dulces y alguna propina para disfrutar de una deliciosa merienda.

Desde su origen, la Vieja Remolona representa el largo y frío invierno, que se resiste a marchar, y los niños, lo nuevo, la primavera.

En 2022, y tras dos años de suspensión por la pandemia, Alcubierre recuperó de forma muy especial la tradición de la Vieja Remolona. De hecho, el pelele volvió a las calles y además, lo hizo junto a otro muy similar, O Viejo Remolón, que viajó desde la localidad de Torres de Montes (Hoya de Huesca).

Los actos relacionados con estos peleles son muy similares en cada uno de estos dos municipios y son únicos en el conjunto del Alto Aragón. También existen algunas diferencias.

En Alcubierre, la Vieja Remolona se guarda de año en año y resulta manejable para los niños. En Torres de Montes, además de un mayor tamaño, O Viejo Remolón arde en el fuego al finalizar la celebración, recordando el destino de otros peleles durante el carnaval, como el Matapanizos y la Barbuchana en Villanueva de Sijena o los ninots Casimiro y Casimira de Fraga.

A lo largo de los últimos años, las dos tradiciones han incorporado la presencia de niñas. Antiguamente, era un acto reservado únicamente a los varones, exentos de acudir ese día a la escuela.

En abril de 2022, los vecinos de Alcubierre devolvieron la visita a los habitantes de Torres de Montes. Ambos esperan seguir cultivando el vínculo creado.

San Caprasio
La romería a la ermita de San Caprasio, que está situada en el punto más alto de la sierra de Alcubierre, se celebra el último sábado del mes de abril. El acto es compartido con los vecinos de Farlete e incluye misa, almuerzos y comidas campestres, reparto de sangría y animación con la charanga.

Alcubierre suma más de 700 años rindiendo culto a San Caprasio, lo que es posible conocer gracias a los documentos conservados en la colección diplomática o cartulario del Monasterio de Montearagón. A nivel religioso, la parroquia de Alcubierre dependía del mismo.

La ermita de San Caprasio se acabó de construir en 1276, último año del reinado de Jaime I El Conquistador. Además de esta fecha, el documento también permite conocer otros datos curiosos como el nombre del primer ermitaño o el de los miembros del concejo que entregaron la obra.

Fiestas de Pascua
Son las fiestas pequeñas del municipio. Dentro de ellas, el Jueves Santo es posible disfrutar de la actuación de los grupos de tambores de pueblos vecinos y al día siguiente, Viernes Santo, tiene lugar la principal procesión por las calles del casco histórico. El sábado hay verbena y además, el Lunes de Pascua es festivo local.

Santa Ana
Alcubierre celebra sus fiestas mayores en honor de Santa Ana (26 de julio). La primera jornada incluye el lanzamiento del cohete anunciador y la salida de la comparsa de cabezudos, que fue creada a través de un taller vecinal impulsado por la asociación local de mujeres y consumidores. Hay seis personajes, entre ellos, destacan La Vieja Remolona y el Bandido Cucaracha. También hay una bruja, un lobo, un cazador y un diablo. La jornada inaugural incluye además una cena popular. A lo largo de los días siguientes, hay verbenas, toros de fuego, actos infantiles o actuaciones relacionadas con la música, el teatro o el folclore.

Gentilicio:   alcoberreños
Patrón:   San Caprasio
Patrona:   Santa Ana