Tres amigas hablando sobre sus relaciones sexuales:

No sé si os ha pasado alguna vez, pero yo cada vez que se la chupo a Juan, se le ponen los huevos fríos.
Pues a mí me pasa lo mismo, cada vez que se la chupo a José, también se le ponen los huevos fríos. ¿Y tú María te ha pasado lo mismo con Antonio?
María contesta:

Pues yo no lo sé, porque nunca se le ha chupado a Antonio.
Al día siguiente, vuelven a reunirse las tres amigas, y descubren que María tiene el ojo morado.

¿Qué te ha pasado?
Nada, que ayer se la chupe a Antonio, y se le pusieron los huevos calientes, y entonces le dije: Qué raro!, después de chuparla, a ti no se te ponen los huevos fríos como a Juan y a José.

Un rey tiene tres hijas trillizas, y la noche antes de cumplir 18 años, les dice:

Mañana, después de la celebración, podéis traer a vuestros novios para que duerman en vuestros cuartos.
Al día siguiente, terminada la fiesta de cumpleaños. Las tres hijas, se van a sus respectivos cuartos de la mano de sus novios.

Al rey, con curiosidad, se acerca a la puerta de la primera de las trillizas y la escucha gritar. Al pasar por la segunda puerta, a su hija reír, y al pasar junto a la tercera puerta, no escucha ningún sonido.

A la mañana siguiente, durante el desayuno, el rey reúne a sus tres hijas y le pregunta a la primera:

Anoche, al pasar por tu puerta te oí gritar ¿porque?
Verás papá, una polla grande en un agujero pequeño duele mucho.
¿Y tú? Al pasar por tu puerta te escuché reír:
Verás papá, una polla pequeña en un agujero grande hace cosquillas.
Y por último tú, ¿por qué no escuché nada al pasar por tu puerta?
Papá, papá. Tú siempre me has dicho que no hable con la boca llena!

Una chica de 20 años, le cuenta a su mejor amiga lo que supone estar casada con un millonario de 80 años:

Es todo un caballero, me lleva de vacaciones a los mejores hoteles, me compra ropa cara, buenos restaurantes, joyas, me regala bombones, me trae el desayuno a la cama…
Ya que hablas de la cama… ¿Qué tal funciona en la cama?
En la cama hacemos un tratamiento.
¿Qué tratamiento?
Mi marido trata, y yo miento.

Un chico joven entra en un bar y pide una copa. Al de un rato pide otra, luego otra, y otra… así hasta 10 copas seguidas.

El camarero, intrigado le pregunta:

Discúlpeme, pero ¿Por qué ha pedido usted 10 copas seguidas? ¿Celebra algo?
Sí, mi primera mamada.
Pues enhorabuena, déjeme que le invite a la copa 11
No hace falta, si este mal sabor no se me ha quitado con 10 copas, con una más no creo que cambie.

Esto van 317 tios por mitad del desierto montaos en un camello, y dice el primero:
- ¡¡¡¡Joer, este camello va follao ¡¡¡
A lo que el ultimo responde:
- ¡¡¡Ufffff, es que si la saco me caigo¡¡¡¡¡

- Soy una persona muy saludable.
- ¿Haces mucho deporte y comes sano?
- No. Es que la gente me saluda por la calle y yo... pues les devuelvo el saludo.